Netflix inicia este año reactivando la nostalgia por una de las telenovelas juveniles más populares de todos los tiempos: Rebelde, creada por la productora Cris Morena (Chiquititas, Floricienta), cuya primera emisión fue lanzada en Argentina entre el 2002 y el 2003 como Rebelde Way, con muy aceptable nivel de sintonía. Pero fue la versión mexicana, producida por Televisa (titulada Rebelde), la que marcó el espíritu juvenil de América Latina entre el 2004 y el 2006, con el protagonismo de Anahí, Dulce María, Alfonso Herrera, Maite Perroni, Christopher Uckermann y Christian Chávez, quienes brillaron aún más en el continente como parte del grupo RBD, creado para promocionar la novela.

Las historias de esos estudiantes del colegio Elite Way School, que llegaban aderezadas con canciones inolvidables, como Sálvame o Solo quédate en silencio, engancharon a toda una generación con sus aspiraciones de convertirse en estrellas musicales en medio de una batalla de bandas, enredos amorosos y diversos problemas.

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Ahora, la nueva Rebelde, también producción mexicana y dirigida por Santiago Limón, sigue una fórmula similar para narrar la historia de otra generación que llega al colegio Elite Way School (ahora llamado EWS) para cumplir sus sueños de convertirse en artistas. Pero primero tendrán que enfrentarse a un enemigo familiar: la Logia, una sociedad secreta que también combatió a la generación de la década del 2000.

Sin embargo, no se trata de un remake, sino que emplean un argumento nuevo con una nueva identidad en sus personajes principales. “Desde uniformes con lentejuelas, tacones, piercings, mechas decoloradas y hasta botas de cuero, el nuevo EWS tiene mucho estilo”, señaló Netflix en un comunicado lanzado para explicar a la audiencia el porqué de cambios fundamentales en la trama y otros elementos.

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Los protagonistas de la nueva serie de Netflix, que debutó el miércoles pasado ubicándose en el top 10 de la plataforma en Ecuador, presenta un elenco compuesto por Azul Aguaita, quien interpreta a la nueva Mía Colucci (personaje que le diera fama internacional a Anahí); el uruguayo Sergio Mayer Mori, hijo de Barbara Mori y Sergio Mayer, en la piel de Esteban, compositor de la nueva banda; Andrea Chaparro, hija del comediante Omar Chaparro, como MJ, joven conservadora que expresa su rebeldía en la música; Jerónimo Cantillo, actor colombiano conocido como el cantante de vallenato Kaleth en la telenovela Los Morales en 2017, y que ahora es Dixon, aspirante a rapero.

También participan Franco Masini, intérprete de Luka Colucci, quien según la trama es primo de la original Mía; Lizeth Selene, quien le da vida a la ruda Andi Sevilla; Alejandro Puente, famoso por la serie El Club, y que ahora caracteriza al popular Sebastián Langarica, y Giovanna Grigio, una actriz brasileña que la conoceremos como Emilia, una adolescente de fuerte personalidad y respuestas ácidas.

El portal Tomatazos.com ya reúne algunas críticas:

“La nueva versión de Rebelde apela a los elementos exactos que harán que, quienes crecieron con las producciones argentina y mexicana, revivan los mejores recuerdos de su infancia o adolescencia. Sin duda es una historia que plantea sus problemáticas de manera rápida y evidente”. Fernanda Pérez Sánchez, de Vogue.

“Un reboot que se siente familiar a la serie original y que da material para que las nuevas generaciones puedan identificarse con el drama, el misterio y por supuesto, las letras de las canciones”. Rama Tampubolon, de Rama’s Screen.

“La producción de Rebelde parece ser bastante pobre a veces. Los diálogos y líneas de los personajes no están del todo bien desarrollados. La actuación no es del todo genial y, honestamente, el guion no da mucho control a los actores para experimentar con sus roles”. Mayurakshi, de Leisure Byte.

Los ocho capítulos de la serie ya están en la plataforma y su final sugiere que habrá una segunda temporada. (E)