Él se cuestionaba la presencia de Dios en su vida. Quería sentirlo más cerca. Días después, mientras limpiaba el tumbado de su casa, la mezcla de guano (excremento de murciélago), residuos de cemento e insecticida intoxicaron gravemente al cantante colombo-ecuatoriano Jhonatan Luna. Conducía su auto para llegar a un dispensario médico cercano a su casa y mientras lo hacía, acompañado de su esposa, sentía cómo de a poco se le dificultaba respirar.