Andrés Cepeda está en las últimas fechas de su gira de 2024, Nuestra Vida en Canciones, con la que ha recorrido Colombia y que terminará en El Campín de Bogotá el 13 de diciembre. Y justamente Bogotá es el nombre de su más reciente álbum, del que se desprende el sencillo que canta con la agrupación Los Ángeles Azules, Cariñito.
A Cepeda, Cariñito lo lleva de vuelta a su adolescencia, a su fiesta de graduación. Porque Bogotá es un disco de homenaje a su ciudad, a las anécdotas e historias vividas en ella. “Uno de esos recuerdos es la noche de mi grado. Eso fue en los años 90, y en ese momento Cariñito ya era un clásico de los años 70. La escogimos para que fuera la canción del promo”. La canción peruana (de autoría de Ángel Aníbal Rosado, interpretada originalmente en 1979 por Los Hijos del Sol) ha tenido muchas versiones, y en esta la canta un colombiano acompañado por “los reyes de la cumbia mexicana”.
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Eso, dice el compositor, le permite hablar y celebrar la transversalidad de la cumbia en el continente. “Pasa por todos los países latinoamericanos y tiene versiones y maneras y estilos desde Argentina hasta México, y por eso quise incluirla en el álbum y llamé a Los Ángeles Azules, los busqué y les hice la propuesta; somos compañeros de la casa discográfica Warner, así que los contacté y les hablé de la canción. ¡Claro que la conocían!, pero nunca la habían grabado y les encantaría que fuera conmigo”.
Se fueron al estudio, hicieron arreglos, cantaron y se animaron a hacer un video en Ciudad de México, conmemorativo de una cena hogareña. “Estoy muy contento, porque es una canción que me trae grandes recuerdos, entra muy bien en este momento del final de año, ha sido parte de las fiestas de diciembre y ha tenido una gran acogida”.
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Cariñito no solo se ha paseado por Latinoamérica, sino que ha trascendido en el tiempo. En 2024 tiene un toque mexicano. “Los diferentes países hacemos la cumbia ligeramente distinta, y esto que traen Los Ángeles Azules es una combinación de algo muy tradicional con algo moderno; me gusta muchísimo esa mezcla”. ¿Por qué ha sido regrabada tantas veces? “Es una buena canción, bien escrita, con una melodía deliciosa, con un fraseo rico de cantar, con una tonalidad superagradable, con muy buena letra. Cuando las canciones son buenas, tienen esa capacidad de quedarse en las diferentes generaciones, se heredan de abuelos a padres e hijos”.
Y es parte del sonido de Navidad y Año Nuevo en este lado del mundo. “En mi país hay algunos vallenatos que son esenciales en diciembre; está la música de (la orquesta venezolana) Billo’s Caracas Boys; hay música boyacense y la cumbia como Cariñito, que antes escuchábamos en la voz de Rodolfo Aicardi (1946-2007); está la música de Pastor López (1944-2019), que también suena muchísimo en diciembre. Entonces, hay un repertorio que los países vamos escogiendo para recordar las navidades, unas épocas de nostalgia, de mirar hacia atrás, de escuchar la música que escuchábamos cuando éramos chiquitos, y quizá por eso se mantienen esos listados”.
De Bogotá ya se han liberado los sencillos El café y Bogotá, y otros llegarán en febrero, con colaboraciones con Luis Fonsi, Morat, Manuel Medrano y Ha*Ash. La siguiente ‘pierna’ de la gira, en 2025, será Europa, Estados Unidos y Latinoamérica; Cepeda llegará a Ecuador en julio, a Quito y Guayaquil, con la posibilidad de visitar otras ciudades.
Mientras esto ocurre, hay otro proyecto en el que el artista toma algo de distancia de la música. Un documental ecológico, enfocado en los páramos de los Andes colombianos. “Vamos a recorrer los páramos más importantes, que son las fuentes naturales de agua de las ciudades principales de nuestro país, y también iremos a varias reservas ecológicas, acampando, viendo las especies, los nacimientos del agua, hablando la relación que tenemos los seres humanos con las fuentes hídricas que compartimos los países andinos”. Y sí, habrá una canción que lo acompañe.
Ya que se ha anotado una colaboración con Los Ángeles Azules, se mantiene en que el ídolo de juventud que le falta es Juan Luis Guerra. “La música que hace, sea bachata, merengue, pop, bolero o salsa, es de mucha altura y de muy buen gusto”. Son géneros a los que Cepeda se ha expuesto desde muy joven, parte de su herencia cultural. Como consumidor, se pasea por las plataformas digitales, pero también disfruta de su colección de acetatos. “Me gusta escuchar un álbum, investigar sobre él, oírlo varias veces, saber cómo fue grabado, cómo fue producido, conocer a los compositores”.
Ganador de cuatro Grammy Latinos, afirma que sí tiene esperanza de participar en 2025 con Bogotá en esa semana, que es “un punto de encuentro de artistas, productores, ingenieros, discográficas, equipos de promoción; es la feria mundial de la música latina (...); es una manera de que los de la industria nos juntemos para compartir experiencias y hacer contactos. De ahí salen muchos proyectos e ideas de lo que puede pasar a futuro”. (E)