Laura Bozzo tiene 48 horas para presentarse voluntariamente y ser internada en el penal estatal de Santiaguito, en el Estado de México, luego de que un juez federal la vinculó éste miércoles a proceso por el delito defraudación fiscal por más de 12 millones de pesos mexicanos (más de $ 600.000).

Así lo confirmaron a El Financiero (México) autoridades judiciales, quienes explicaron que si la presentadora no acude en el citado lapso, se iniciará una “cacería” en su contra con el fin de que responda ante la justicia mexicana.

No se sabe si la Bozzo, de origen peruano, se encuentra en México o está en el extranjero. En este último caso y de no acudir al juzgado en dos días, se libraría en su contra la ficha roja de búsqueda internacional.

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Fue este miércoles cuando el juez federal dictó el auto de vinculación a proceso y ordenó la prisión preventiva oficiosa contra la conductora.

Según las autoridades, aunque Bozzo se encontraba en una negociación con Hacienda para el pago de dichos impuestos, dicho acuerdo no prosperó.

De hecho, la mujer decidió vender una propiedad que había dejado en garantía, aunado a que no acreditó a las autoridades fiscales su domicilio.

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Ante la incertidumbre de pago, las autoridades hacendarias mexicanas decidieron emprender un juicio en su contra por el cual podría Bozzo pasar entre 3 y 9 años en prisión.

Se espera que Bozzo, quien ya ha tenido problemas con la justicia hace varios años, entre por su propio pie al reclusorio en las próximas horas por no haber acreditado su domicilio permanente, y para evitar que haya riesgo de fuga. Se sabe que hace tres meses la autoproclamada “defensora de los pobres” ya había solicitado un acuerdo reparatorio para pagar el millonario adeudo fiscal, para así evitar ir a la cárcel, hecho que al parecer está por ocurrir.