Una nueva cita hizo comparecer a la expareja más querida del mundo del espectáculo. Shakira y Gerard Piqué se vieron nuevamente las caras en el bufete que representa al futbolista, para continuar las conversaciones sobre la custodia de sus hijos, pero la falta de un acuerdo sacó a relucir el mal carácter del integrante del equipo azulgrana.