Tras concluir con broche de oro la sexta temporada del popular programa Yo me llamo, la querida artista Pamela Cortés decidió darse un merecido descanso y escaparse a la vibrante ciudad de Miami. Esta escapada no ha sido solo por placer, sino también una ocasión especial para disfrutar en familia.
La sonrisa de su hijo Maximilian, fruto de su unión con David Harutyunyan, es un reflejo de las maravillosas experiencias que han compartido en tierras estadounidenses. “Conocer un país nuevo, sabores, olores, colores. Que tu curiosidad y felicidad sean infinitos mi amor”, compartió Pamela a través de sus redes, dejando ver lo emocionante que ha sido este viaje para su pequeño.
No es fácil ser hijo de una figura pública. Las demandas del trabajo y los cambios imprevistos en la agenda pueden hacer que la vida familiar sea un desafío. Sin embargo, Max ha demostrado ser un niño comprensivo y lleno de amor. Pamela agradeció a su hijo por su paciencia y adaptabilidad: “Gracias por siempre acomodarte a nuestra movida agenda de trabajo o mis cambios de salud y por vivir con amor en los cambios de planes. Gracias por ser tan dulce y dejarnos amarte”.
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El pequeño de 10 años siente lo mismo por su madre: “Eres una mamá excelente para mí, la mejor que puede haber en el mundo. Te quiero mucho y siempre, aunque estés ocupada, siempre vas a dedicarme una parte del día a mí”.
El viaje ha sido repleto de actividades. Desde paseos por la icónica Miami Beach hasta degustar deliciosos platos locales, la familia ha aprovechado cada momento. Además, la ocasión ha sido aún más especial, ya que coincide con el cumpleaños número 58 de David Harutyunyan. Sin duda, un motivo más para celebrar en grande.