¿Quién no recuerda la película “Dirty Dancing” en la década de los 80? El guión de este film impactó a los cinéfilos de esa época por sus portagonistas Patrick Swayze y Jennifer Grey, quienes se robaron el corazón de todos con su historia de amor en un éxito indiscutible.

Y a 35 años de su estreno, la actriz que dio vida a Frances “Baby” Houseman reaparece en una entrevista en exclusiva para People en la que presentó sus biografía Out of the Corner”, un relato crudo en el que expone todas las situaciones que la llevaron a ser excluida de las producciones de Hollywood.

Como un destierro, fue lo que vivió Jennifer Grey y esa exclusión la señaló como una consecuencia a su decisión de someterse a una cirugía estética para modificar su nariz. Sin saber lo que el futuro le depararía, la rinoplastia que eligió se convirtió en su peor decisión, luego de que unos malos resultados frenaron el éxito de su carrera como actriz.

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La protagonista de “Dirty Dancing” lamentó enormemente ese paso que la desterró por completo de las producciones y nunca más volvió a ser llamada para ser parte de un elenco cinematográfico. De allí que expresara que su operación de la nariz la hizo “perder la identidad y la carrera de la noche a la mañana”. (E)