Ellen DeGeneres ha visto a su público irse desde septiembre de 2020, luego de que exempleados presentaran reportes de que en el programa que lleva su nombre se fomenta un ambiente tóxico.

Al inicio de la temporada 18 de su talk show, Ellen presentó sus disculpas. “Me enteré de que pasan cosas aquí que nunca debieron suceder”, dijo. “Lo tomo muy en serio. Y quiero decir que lo siento a las personas que fueron afectadas”.

La gente estuvo allí para ver la disculpa, y el episodio tuvo los mayores índices de audiencia en cuatro años. Y luego, el público cambió de canal. The Ellen Show ha perdido más de un millón de televidentes, quedando con 1,5 millones de espectadores en los últimos seis meses, en comparación con los 2,6 millones en el mismo periodo el año pasado, un declive del 43%, según publicó The New York Times.

Publicidad

En julio de 2020, una decena de exempleados hablaron con BuzzFeed News sobre sus penurias en el set: fueron despedidos después de un permiso médico o de tomar días de duelo para asistir a funerales de familiares. Una empleada dice que dejó el puesto harta de los comentarios sobre su raza. Y otros afirmaron que una de las reglas del estudio es no tratar de hablarle a Ellen cuando ella está allí. Más tarde, el mismo medio publicó que algunas de las acusaciones a los productores incluían conducta inapropiada y acoso sexual.

La mayoría de los entrevistados, que permanecieron anónimos por temor a represalias, culparon a los productores ejecutivos y altos cargos por la toxicidad, pero uno dijo que, al final, es el nombre de Ellen el que sale en la pantalla y “ella debería tomar más responsabilidad” por lo que ocurre a su alrededor.

“Creo que los productores ejecutivos la rodean y le dicen que todo va bien, que todo el mundo está feliz, y ella se lo cree, pero es su responsabilidad ir más allá”, dijo uno de los despedidos, recordando que la actriz y presentadora escogió hace años como lema personal la frase “Be Kind” (Sé amable).

Publicidad

Entre marzo y abril de 2020, el equipo de producción, desde iluminadores hasta operadores de cámara, tuvieron dos semanas de para involuntaria, sin saber si les pagarían y cuánto, para luego entrar en un hiato programado. En cambio, dijeron a Variety, descubrieron que Ellen había expandido su trabajo a cinco episodios por semana (normalmente eran cuatro) y estaría grabando desde su casa, en un set remoto, con la ayuda de una compañía externa.

En una carta al staff en julio de 2020, Ellen anunció que habría una investigación en el set, pero también estableció que no era totalmente responsable por lo ocurrido, pues había puesto el show en manos de los productores.