El último reto de eliminación en MasterChef Celebrity Ecuador puso a prueba la creatividad de los participantes con un episodio dedicado a los tubérculos, ingredientes fundamentales en la cocina ecuatoriana. El desafío era claro, hacer que estos productos brillaran como protagonistas del plato. Sin embargo, para Esteban ‘Ave’ Jaramillo, el reto se convirtió en su última oportunidad dentro de la competencia.

Cada participante eligió su propio tubérculo para trabajar, y Ave optó por el melloco. Con él presentó un plato que nombró open nic, un homenaje a los espacios de stand-up que ha impulsado junto con sus amigos en Quito, representando su deseo de salir de su zona de confort.

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Fiel a esa idea, decidió arriesgarse con una preparación que nunca había intentado: un carpaccio con ensalada y una salsa de aguachile.

El problema llegó al momento de la evaluación. El chef Jorge Rausch destacó que, si bien la proteína tenía buen sabor y la salsa tipo aguachile aportaba un toque interesante, el plato no cumplía con la técnica de un carpaccio real, pero le resaltó que el sabor de la salsa de aguachile estaba deliciosa.

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La chef Irene González reforzó la crítica. “No es un carpaccio”, señalando que el corte de la carne era demasiado grueso y estaba cocido, cuando la base de esta preparación es la carne cruda y finamente laminada. Además, le hizo notar que la parte proteica terminaba dominando el plato, cuando el verdadero protagonista debía ser el tubérculo.

Por su parte, la chef Carolina Sánchez cuestionó la consistencia de la salsa. Para ella, el aguachile de Ave era más bien una salsa espesa y no un caldo ligero como se esperaría. Sin embargo, el participante defendió su propuesta, asegurando que desde el inicio presentó su versión del platillo y nunca lo vendió como un aguachile tradicional.

A pesar de sus argumentos, la evaluación no jugó a su favor. Cuando los jueces deliberaron, Ave Jaramillo quedó entre los tres peores platos de la noche, junto a Naíza y Christian Norris, quienes también habían cometido errores técnicos y de emplatado. Sin embargo, el último fue salvado del reto de eliminación.

Finalmente, fue él quien tuvo que despedirse de la competencia y al escuchar su nombre, Ave abrazó a Naíza, con quien había quedado en la recta final, y recibió las palabras de despedida del jurado.

“La razón por la que te vas... es que no entendimos muy bien tu plato”, le explicaron, añadiendo que no había logrado cumplir la consigna principal.

Desde el balcón, los demás concursantes lo miraban con tristeza, conscientes de que cada vez la competencia se volvía más dura. Antes de salir de la cocina, Ave dejó su delantal negro y lanzó una advertencia con tono cómico a sus compañeros: “Ojo, cuidado, que ya solo quedan los capos”. (E)