Los festejos por los 25 años desde que la sala de cine OchoyMedio (sector La Floresta de Quito) —que comenzó a gestarse como proyecto en 1997— han comenzado oficialmente.
Y aunque para Mariana Andrade, directora del espacio cultural, la mejor celebración es seguir con las puertas del cine abiertas y recibiendo semana a semana a su público, sí invitaron al autor Miguel Alvear Lalley para producir una publicación (con historias que bien podrían llegar a adaptarse al formato audiovisual) alrededor de las anécdotas y personajes que han transitado por OchoyMedio, inaugurado oficialmente el 14 de septiembre del 2001.
Publicidad
“Mariana me contactó y en plena pandemia empezamos a juntarnos, a conversar y recordar ciertos episodios que habíamos vivido juntos, porque yo he estado vinculado con el OchoyMedio desde que se inició, de diferentes maneras. Entonces ha sido ya casi una buena parte de nuestras vidas”, recuerda Alvear.
Finalmente, la publicación tomó forma bajo el nombre de La pasión de Juana Arcos, un personaje inspirado en Andrade. “Yo a Mariana siempre le decía que ella tiene complejo de Juana de Arco, porque con la espada quiere que la realidad sea como a ella le gustaría que fuera. Y eso la ha llevado a lograr muchas cosas, pero también a veces a tener confrontaciones, no ser entendida o ser malentendida, pero digamos que esta forma de ser —que logra muchas cosas y despierta muchas pasiones— es buen material para cualquier thriller”.
Publicidad
Para Andrade, Alvear siempre fue un observador silencioso y testigo de muchas etapas de la historia de la reconocida sala de cine. “Para mí, él es la persona indicada para hacer algo así, yo no confiaría fácilmente mi historia personal a nadie, pero sé que Miguel lo hace a su manera con humor, con mucho respeto también, pero también pasándose de la línea y yo le he dado esa libertad. Es una obra de Miguel basada en nosotros como personajes, pero es una obra suya y eso me gusta mucho”.
En Guayaquil, la presentación se llevará a cabo en MZ14 (Panamá y av. 9 de Octubre) este miércoles 13 de septiembre, desde las 18:00, con entrada libre. El libro estará a la venta en el sitio.
El cine, que aquí lo llamamos el Felina, es el escenario, ¿pero qué otros personajes confluyen allí?
Miguel: Son ocho historias, pero hay un episodio dedicado a la relación del cine con el barrio La Floresta, en Quito, que es un barrio muy diverso, donde también hay muchos intereses, además de que es un barrio donde se han afincado un poco las expresiones culturales de esa parte de la ciudad y hay dinámicas a veces también de intención. Hay un episodio también dedicado a las premiaciones del cine ecuatoriano a través del cual se pueden ver ciertos rasgos que el mundo del cine tiene, pero la línea común entre todos estos episodios es la pasión de Juana por mantener este cine abierto a como dé lugar y en ese esfuerzo se han vivido muchas historias.
Mariana: La única manera que hemos tenido de sobrevivir ha sido por la pasión que hemos puesto en todos los imposibles que hemos tenido. Y entonces el libro te cuenta esta dinámica del personaje incluso frente a manifestaciones políticas contrarias, porque ha sido un personaje que ha vivido mucho esa polarización, es un personaje que quieren u odian. El Felina, cuando hablamos del libro, es un valle de pasiones que generan nuestras propias historias y eso hace que el libro sea muy dinámico, de fácil lectura, de divertimento, y podría ser el inicio de lo que queremos, una serie de animación, porque de momento son personajes bastante caricaturescos pues lo que ha hecho Miguel es exagerar nuestros propios defectos y virtudes.
¿Quiénes serán los anfitriones del lanzamiento del libro en las distintas ciudades?
Miguel: En Guayaquil es Andrés Crespo. Mientras que Fidel Intriago será el anfitrión en Manta. Juan Carlos Moya estará en Quito y Galo Alfredo Torres, en Cuenca.
Mariana: Todos han sido parte de la historia del cine, así que no solo van a leer y opinar del libro, sino que ellos también conocen a cada personaje y cada situación que se menciona en el libro. No quisimos que el evento fuera solo una conversación de entrevista o de preguntas y respuestas, sino que queremos que ellos también manifiesten su participación en la historia. No son gente de fuera, sino que son personas totalmente comprometidas e insertadas en la historia que estamos contando.
Y este es el inicio de las celebraciones, ¿qué otros eventos tienen planeados?
Mariana: Nuestra mayor celebración es seguir vivos y seguir siendo un espacio de libertad creativa. Nosotros somos militantes culturales y gente de cine y a mí me importa muy poco la posición política de los gobiernos, pero entonces si los presidentes siguen viniendo y siguen pensando que el OchoyMedio es el sitio para resolver cosas, que vengan, que aterricen por ahí y que siga vivo este espacio. La mejor celebración es seguir en pie y algún día volveremos a Guayaquil, aunque no sé cuándo. Ha sido un sueño postergado.
También este año tuvieron el privilegio de ser una de las pocas salas de Latinoamérica en presentar Oppenheimer en 35 mm, ¿cómo se dio esa gestión?
Mariana: Ocurrió porque seguimos siendo una sala en pie, llena de mucho cariño y de mucho reconocimiento en el país y a nivel regional. Y eso hace que cuando los grandes distribuidores como el de Oppenheimer, que en este caso fue Warner, hicieron una investigación para saber qué salas tenían 35 milímetros todavía en pie, nosotros estemos en pie y con el proyector que aún funciona. Y fue una experiencia linda porque quienes están manejando el proyector de 35 milímetros son estudiantes de cine entre muy jóvenes, desde los 18 años, y que nunca habían conocido este formato.
Y entonces se juntó todo: el respeto de los distribuidores para darte la película, el tener un proyector de 35 milímetros vivo y tener esta transmisión de conocimientos hacia los jóvenes y las nuevas generaciones del cine de ahora. Entonces fue muy grato y seguimos con grandes estrenos.