‘El exorcista del papa’, cinta inspirada en el caso real del sacerdote Gabriele Amorth se estrena este 6 de abril, protagonizada por Russell Crowe

Inspirada en los archivos reales del sacerdote Gabriele Amorth (1925-2016), quien se desempeñó como Exorcista Jefe del Vaticano, la cinta El exorcista del papa sigue a Amorth (Russell Crowe) mientras investiga la posesión aterradora de un niño y termina descubriendo una conspiración centenaria que el Vaticano ha tratado desesperadamente de mantener oculta.

Conocido por algunos como el decano de los exorcistas, Gabriele Amorth fue para miles de personas una luz en la oscuridad como un hombre que llevó a cabo miles de exorcismos para la Iglesia y que relató en dos memorias (disponibles en Amazon) que van mucho más allá de las anécdotas espeluznantes para explorar las amenazas a la humanidad de los demonios.

Ahora, esos escritos del padre Amorth llegan a la pantalla grande por primera vez. “En realidad, sí existe un trabajo real llamado Jefe Exorcista en el Vaticano”, comentó Crowe, el actor protagonista. “El padre Gabriele Amorth fue un verdadero hombre que ocupó ese cargo durante 36 años y estuvo involucrado en decenas de miles de exorcismos. Y cuando haces algo miles de veces, te vuelves muy, muy bueno en eso”.

En la película, Amorth es también un hombre de fuertes convicciones religiosas y un investigador obsesivo. En la película, el padre Amorth y su pareja, el padre Esquibel, interpretado por Daniel Zovatto, investiga una posesión en la Abadía de San Sebastián en Castilla, España, donde una familia joven está renovando la antigua propiedad. “Esos hechos ocurrieron durante algunos de los días más oscuros de la Iglesia católica, ya que se impuso un castigo a personas que no estaban a la altura de la profundidad de sus creencias. Todos pensamos que eso fue una excelente manera de profundizar en la historia de España”.

“Sin duda es un hombre de fe profunda, pero también muy definitivamente, fe en sí mismo”, agrega Crowe. “Está decidido a ser abierto y directo; él no tiene miedo de las fallas de la humanidad. Acepta todas las debilidades y peculiaridades de las personas, así de sencillo. El nivel de honestidad basado en el instinto lo ayuda a hacer su trabajo”.

La cinta estuvo a cargo del director australiano Julius Avery, quien cree que el sacerdote Amorth se distingue como personaje por su apariencia y creencias contradictorias, pero de hecho perfectamente lógicas: un hombre bien educado, un escéptico versado en psicología moderna que es también un ferviente creyente en el poder de Dios y el diablo. “Creo que el 98 % de todo puede ser explicado por la ciencia”, expresó Avery. “Pero hay ese último 2 % que no se puede, y eso es lo que exploramos en la película”.

Otros productores habían intentado, sin éxito, convencer a Amorth de convertir sus memorias en una película, pero Michael Patrick Kaczmarek lo consiguió. “Creo que pude tener éxito donde otros productores fallaron porque pude convencer al padre Amorth acerca de mi sincera devoción religiosa”, explicó Kaczmarek. “En nuestras conversaciones pude convencerlo de que si aceptaba trabajar conmigo, trataría de asegurarme de que la catolicidad se preservaría en la película y que sería respetado como persona a lo largo con la Iglesia y también su orden religiosa.”

“Estas memorias son un tesoro de cientos de historias, anécdotas, casos reales, donde el padre Amorth estaba exorcizando demonios. El cielo era el límite en términos de la cantidad de historias que podríamos contar”, dice Kaczmarek. “Mis socios productores y yo siempre lo presentamos como el ‘James Bond’ de los exorcistas. Hay toda una colección de historias y todo un universo de historias que se podrían poner en común desde las dos memorias”.