Hace 75 años, en febrero de 1942, el autor más popular en Europa se suicidó en un bungaló en la ciudad brasileña de Petrópolis, a 10.000 km de su lugar de nacimiento en Viena. El año previo a su muerte, Stefan Zweig terminó dos estudios contrastantes: El mundo de ayer: memorias de un europeo, elegía por una civilización ahora consumida por la guerra, y Brasil: tierra del futuro, retrato optimista de un nuevo mundo. La historia de esos dos libros, y del refugiado que los escribió, nos ofrece una guía a la trampa del nacionalismo y el trauma del exilio.