El culebrón de la separación de Shakira y Gerard Piqué no deja de acaparar titulares, especialmente por la mala relación entre la expareja, que comparte dos hijos que son la causa de todas sus disputas actuales, publica diario AS.

Tras largas negociaciones para llegar a un acuerdo sobre la custodia de Milan y Sasha, finalmente los dos menores viven con su madre y disfrutan de unos días al mes con el exfutbolista del Barcelona, así como se reparten también los periodos vacacionales entre los progenitores.

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Eso sí, con quien no coinciden es con Clara Chía, ya que este mismo acuerdo establece una cláusula para mantenerla alejada de los niños mientras la relación no se formalice. Así lo quiso dejar atado la colombiana, quien pretendía proteger a sus hijos de las mujeres que pudieran estar de paso en la vida de su padre, para darles estabilidad a los pequeños.

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Un punto del convenio que el otrora futbolista está cumpliendo a rajatabla, aunque los pequeños conocen a la catalana porque trabaja en Kosmos, la empresa de Piqué.

De hecho, según varios medios latinoamericanos, y como recoge ABC, los dos menores utilizan un descriptivo apodo con Chía: a ella se refieren como “la empleada de papá”.

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Shakira, en Barcelona

Por su parte, Shakira, para quien también se supo que en casa de los padres de Piqué le tenían su propio apodo (concretamente, la llamaban ‘la Bruja’, de ahí que ella se vengase con la figura de la hechicera en el balcón), se encuentra ya en Barcelona.

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La de Barranquilla, que el próximo día 19 recogerá a sus hijos, que se encuentran ahora disfrutando de unos días con su padre, llegó a la Ciudad Condal procedente de Inglaterra para seguir preparando su defensa sobre su supuesto fraude fiscal.

La cantante tiene previsto reunirse con Pau Molins, el abogado que lleva su defensa en el proceso abierto con la Agencia Tributaria española, cuyo juicio se espera para otoño. (D)