No se escandalice por el título. No siento rencor alguno hacia Chile ni hacia los chilenos. Tengo muy buenos amigos aquí y allá y los gané en el deporte y en el periodismo. Tengo gratos recuerdos de mis estancias que empezaron en 1972 y 1975 en los Sudamericanos de Natación. En 1995 estuve en Santiago con ocasión del Congreso de la Federación de Periodistas Deportivos de América (entidad de la que fui director), y en 2019 regresé a la capital chilena a otro Sudamericano de Natación.