Señor del sonido, necesitamos más volumen, dijo el cantante Darío García, y tras un breve “hola”, “sí, sí” interpretó Chola cuencana. Fue la primera canción de la noche. Eran las 19:30 del pasado martes y García estaba en el escenario del Teatro Häagen-Dazs Calderón, de Madrid, junto con la Orquesta Sinfónica de Guayaquil, que ese día inauguraba su gira europea con el concierto Jaramillo Sinfónico, dirigido por el maestro Davit Harutyunyan. Se trataba de la primera de las siete presentaciones que tiene previsto cumplir la institución musical ecuatoriana en ciudades de España e Italia.










