El neozelandés Scott Dixon dio otro gran paso para conquistar por segunda vez el título de la IndyCar, al superar el sábado al brasileño Helio Castroneves, su más cercano perseguidor, para obtener el triunfo en la carrera de Edmonton.
Castroneves, quien busca todavía su primera victoria de la temporada, siguió presionando a Dixon en cada vuelta, sobre el circuito temporal en el aeropuerto local. Pero el brasileño estuvo a punto de salirse de la pista, por el desgaste en sus neumáticos, a seis vueltas del final.
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Ello permitió que el neozelandés se enfilara a su quinta victoria de la campaña.
Tengo que agradecer a la escudería, dijo Dixon. Tuvimos algunos problemas el fin de semana... Así que no esperábamos esto.
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Castroneves tuvo la punta durante 35 vueltas y pareció contar con el mejor de los 27 bólidos en buena parte de la jornada. Pero Dixon, quien se ubicaba tercero detrás de Castroneves y del australiano Ryan Briscoe, sus compañeros de Penske Racing, rebasó a ambos durante una parada en los fosos, con bandera amarilla, en la vuelta 51.
Después de Castroneves, el latinoamericano mejor ubicado fue el también brasileño Tony Kanaan, en el noveno puesto.
El venezolano E. J. Viso fue 15to y el mexicano Mario Domínguez no concluyó la carrera por un problema mecánico.