Según estadísticas de la firma internacional Standish Group, el 53% de los proyectos de desarrollo de aplicaciones en las empresas presenta retrasos, el 29% culmina en el tiempo planeado y el 18% es abandonado, refiere Lenín Freire, director de maestría en sistemas de información de la Espol.
La falta de sustento sobre los beneficios económicos que trae la implantación de un sistema de información en las compañías es una de las principales dificultades de estos proyectos que por lo general demandan altas inversiones, comenta Juan Arnao, vicepresidente de tecnologías de la información de la empresa Reybanpac.
Por otro lado, la resistencia al cambio de parte de los empleados de las organizaciones también genera retrasos en este tipo de planes, dado que son los principales usuarios de los sistemas informáticos. Por ello, el empresario interesado en cambiar la forma de manejo de información con ayuda de la tecnología informática, debe evaluar la efectividad y falencias de sus sistemas actuales y la capacidad de su personal de soportar todo un proceso de transformación.
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Entre las oportunidades para implantar uno de estos sistemas se encuentra la falta de integración entre los programas de los diferentes departamentos de las empresas, lo que provoca retrasos en la entrega de información a clientes y funcionarios, dice Julio Villacís, director de preventas de Comware.
Sin embargo, la clave del éxito está en los procesos de la empresa y su capital humano y no solo en la tecnología, dijo Arnao, por lo cual el dueño del negocio debe involucrarse con todo el proceso de desarrollo de la solución informática.
Una forma de medir el real avance de estos proyectos es mediante el control de indicadores de éxito cuantificables dentro de periodos de tiempo definidos, agregó Freire.