En Tena la prioridad son las obras viales

El principal tema respecto al cual está de acuerdo la mayoría de  habitantes de Tena es exigir al régimen de Alfredo Palacio un compromiso de continuar las obras de la troncal amazónica (carretera que conectará  seis provincias de esa región), y para ello, esperan tener pronto un diálogo con el Mandatario.

Ayer, hasta las 14h00, el ambiente en esta capital fue de tranquilidad, solamente interrumpido por una marcha de cerca de 50 personas, quienes se oponen a que el gobernador de Napo, Marco Miño, tome posesión de su despacho.

Ellos son partidarios de que ese cargo sea ocupado por Timoteo Tapuy, un indígena quichua, a quien la población identifica como partidario del ex presidente Lucio Gutiérrez. Como resultado, esa entidad sigue en acefalía.

El lunes anterior se conformó un comité de mediación, en el cual participan, entre otros, el obispo Pablo Mietto; y la defensora del Pueblo, Omaida Mera; a fin de dialogar con Tapuy y lograr un consenso, pero el dirigente no ha acudido al llamado,  relata el obispo.

Respecto a los anuncios de un posible retorno al país del ex mandatario Lucio Gutiérrez, la población los ha tomado con calma.

Salvador Suasnavas, miembro de Sociedad Patriótica, considera que ese no es un tema fundamental para la provincia, sino el de lograr que el actual Gobierno concluya las obras que no pudo continuar Gutiérrez por su destitución.

Según Suasnavas, las protestas obedecen a un interés de caotizar la región y no cree que se las deba tomar como un síntoma de que el retorno de Gutiérrez esté cerca. Otros allegados a ese partido creen que los que están detrás del grupo que protesta contra el gobernador son el alcalde, Washington Varela (SP), y el ex prefecto, Édison Chávez (SP), conocido político local, ex socialcristiano, actual militante de SP, y para muchos, un hombre cercano al PRE.

Consultado sobre el tema, Varela lo niega. “Yo no me opongo a la posesión de (el gobernador) Miño, porque esa no es mi función. Es la gente la que no está de acuerdo con esa designación”, dice desde su despacho. Sin embargo, a principios de junio se negó a firmar un documento en el cual la prefecta de Napo, Gina Sanmiguel (PSC); el diputado Domingo Tanguila  y los alcaldes de Archidona, Quijos, Chaco y Arosemena Tola, se comprometían a “respaldar el restablecimiento de la paz y la tranquilidad ciudadana”, y también a “respaldar el nombramiento de Marco Miño como gobernador”.

Varela dice que no quería inmiscuirse en ese tema, pero los que lo critican dicen que consultó con Chávez, antes de tomar esa decisión.