El ex presidente social demócrata Rodrigo Borja, pidió este lunes la destitución del jefe de estado, Lucio Gutiérrez, a quien calificó como   incompetente, absurdo e inhábil. 
 
Borja, quien gobernó Ecuador entre 1988 y 1992, y actualmente en la oposición, aseguró que  "el primer requisito para gobernar es ser creíble, suscitar confianza, un hombre que no tiene credibilidad no puede gobernar ni en su casa". 
 
Se debe destituir a Gutiérrez y hay causas, si lo hubiéramos destituido hace un año, a Ecuador le hubiéramos ahorrado todo lo que ha tenido que sufrir, este proceso de descomposición que se va ahondando y profundizando en el país, dijo. 
 
En declaraciones al canal Teleamazonas, expresó que "nada marcha bien, seis ministros de Agricultura, seis ministros de Salud ...  ¿qué administración es ésta?". 
 
"Es un asunto demencial y la gente no se da cuenta que tenemos a un incompetente a tiempo completo en la presidencia de la República", afirmó Borja, quien es el líder histórico del partido Izquierda Democrática. 
 
Manifestó que  "si quieren hundir al país sigamos por este camino ... hay causas para renovar, no le podemos tolerar más a un hombre tan absurdo, tan incompetente, tan inhábil". 
 
Reconoció que su iniciativa no cuenta con el apoyo suficiente de los diputados porque  "no hay los votos en el Congreso, hay las causas pero no hay los votos." 
 
Sugirió que ante la posibilidad de reemplazar a Gutiérrez, se debería mantener la línea de sucesión constitucional, entregando el mando al vicepresidente, Alfredo Palacio, a menos que "haya motivos de destitución del vicepresidente". 
 
Añadió que el gobierno es corrupto, refiriéndose a sus funcionarios como una "gavilla de malandrines que están colocados en las más altas posiciones del gobierno". 
 
Para destituir al presidente en Ecuador la ley reconoce como causales la traición a la patria, cohecho o afectar al honor nacional, y que para iniciar el proceso en el Congreso se requiere de la voluntad expresa del 75% de los diputados. 
 
Borja y Gutiérrez, quien termina su periodo de gobierno de cuatro años en enero del 2007, han sostenido duelos verbales desde hace más de un año, en los cuales el ex mandatario ha solicitado en múltiples ocasiones la destitución del jefe de estado.