Dos bombas explotaron este sábado en las localidades norteñas de San Vicente de la Barquera (Cantabria) y Ribadesella (Asturias), sin causar heridos, después de que sendos comunicantes informasen de su colocación en nombre de la banda terrorista ETA.
 
La bomba que ha estallado en San Vicente de la Barquera, una de las localidades más turísticas de Cantabria, pasadas las 13h00 horas locales (15h00 GMT) estaba colocada en una bolsa depositada junto a un seto de un parque del centro del municipio y no en un coche, como inicialmente se informó, señalaron a EFE fuentes oficiales.
 
Las mismas fuentes indicaron que el artefacto explotó después de que la Guardia Civil desalojara la zona, tras la llamada de un comunicante anónimo al diario vasco "Gara", usado habitualmente por ETA como portavoz, para avisar en nombre de la banda terrorista de que se habían colocado una bomba en la avenida Miramar.
 
El artefacto explotó en un seto del parque situado en el centro de la población, rodeado de numerosos bares y restaurantes y a escasos metros del lugar donde cada sábado se celebra un mercadillo.
 
La Guardia Civil ha acordonado y asegurado todo el centro del municipio, en el que se encontraban cientos de personas, y ha cortado el tráfico por la carretera que cruza la población, indicaron a EFE en San Vicente los servicios de emergencias que están actuando en el lugar de los hechos.
 
Otra bomba estalló casi a la misma hora en Ribadesella (Asturias), minutos después de que el diario asturiano La Nueva España recibiera un aviso de su colocación en nombre de ETA, informaron a EFE fuentes de los servicios de emergencias.
 
Las mismas fuentes indicaron que la deflagración no causó ningún herido y que el artefacto, de escasa potencia, estaba situado a la altura del hotel La Playa, uno de cuyos tabiques resultó afectado por la explosión.
 
La llamada al diario asturiano se produjo en torno a las 12.10 horas (14.10 GMT) y el comunicante anunció la colocación del explosivo en Ribadesella y también la del artefacto colocado en la localidad cántabra de San Vicente de la Barquera.
 
Asimismo se advertía de la colocación de un tercer artefacto explosivo en otra localidad, que no pudo ser identificada por la persona que atendió la llamada debido a la rapidez con la que hablaba.
 
Fuentes del periódico indicaron además que el comunicante interrumpió la llamada cuando se le requirió que repitiera el nombre de esta tercera localidad.
 
El estallido se produjo cuando en la localidad de Ribadesella se encontraban presentes autoridades nacionales y locales y miles de personas, congregadas por la celebración de la 68 edición del tradicional Descenso Internacional del Sella en la denominada "Fiesta de las Piraguas".
 
Entre las personalidades asistentes a este evento se encontraban la ministra española de Agricultura, Elena Espinosa; el presidente regional de Asturias, Vicente Alvarez Areces; y el secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, que pudieron escuchar la explosión desde la tribuna dispuesta para la entrega del premio.
 
La Guardia Civil ha acordonado la zona próxima al lugar de la explosión, situado frente a la playa de Santa Marina.
 
La policía española dio a conocer ayer la identidad de seis presuntos miembros de ETA que podrían estar preparando algún atentado para cometer durante el periodo estival, época del año en la que la banda suele atentar contra algún interés turístico.
 
También el pasado mes de junio, la policía francesa, en colaboración con la española, desarticuló el núcleo dirigente de los grupos de reserva del aparato militar de ETA y detuvo a ocho personas en diferentes localidades del ese país.
 
Con esa operación, los responsables policiales consideraron frustrada en parte la campaña de verano de la banda terrorista.
 
La banda terrorista no cometía atentados en verano desde el año 2002, cuando colocó sendas bombas en las localidades turísticas mediterráneas de Alicante y Benidorm.