El presidente de la Industria Textil Ecuatoriana, Sebastián Borja, denunció hoy que esa industria "está herida" por el contrabando de textiles y confecciones desde Perú, Asia y Panamá.
"La industria textil ecuatoriana aporta con el 3,2% del Producto Interno Bruto (PIB) del Ecuador, pero aún así está herida por los altos niveles de contrabando que llegan al país", sostuvo Borja en diálogo con periodistas.
Culpó de esa situación al gobierno del presidente Gustavo Noboa y dijo que "hay una total inacción gubernamental para combatirlo".
El industrial reveló que la industria textil aporta con 25.000 empleos directos y más de 100.000 indirectos a la producción nacional, y destacó que "estamos bordeando los 70 millones de dólares en exportaciones".
"Hay un grotesco aumento del contrabando procedente de Perú, Panamá y Asia", dijo Borja que mencionó que "por lo menos el 45% de las importaciones de textiles y confecciones que llegan al Ecuador, no es declarado".
Borja puso un ejemplo y manifestó que mientras el gobierno peruano a través de una partida arancelaria (pantalones para mujer) declara que exportó 1.389.572 dólares hacia Ecuador, en el Banco Central de Ecuador aseguran que solo se importó, con esa misma partida arancelaria, 711.458 dólares.
"Esto nos da una diferencia de 678.114 dólares lo que quiere decir que hay un 49% no declarado y por lo tanto se convierte en contrabando", dijo.
Borja denunció que las autoridades aduaneras ecuatorianas "poco y nada hacen en la localidad de Huaquillas, fronteriza con Perú, para evitar el ingreso de mercancía de contrabando".
Tras sostener que los textileros han solicitado al gobierno implantar un rígido control aduanero en Huaquillas y en las carreteras que provienen del Perú, dijo que la industria textilera "se merece una mejor suerte".
Explicó que los textileros ecuatorianos están en capacidad de competir en calidad y cantidad, pero que el contrabando "nos está proporcionando graves pérdidas económicas".