Nao habla 19 idiomas, te recibe con un saludo y siempre espera a que contestes. Es simpático y amigable, pero también muy independiente. Juega al fútbol con sus amigos y, si oye las primeras notas del Gangnam style de PSY, no duda en arrancarse a bailar. Nada de esto sería especial, de no ser porque Nao está hecho de plástico y metal. Es un robot.