¿Estaría de acuerdo con el retorno de los casinos y las salas de juegos de azar en el país? (O)

Patricio Muñoz

Podría aceptarse el funcionamiento de los casinos, siempre y cuando se les exija financiar centros de atención para las personas con ludopatía. Con eso se podría garantizar que las personas no se conviertan en adictas a las apuestas o a los juegos de azar. (O)

Carlos Moncayo Cervantes

No, no estoy de acuerdo. Considero que es un contrasentido del presidente Daniel Noboa querer que haya casinos, que son el ámbito perfecto para el lavado de dinero, y su lucha contra la economía de los grupos de delincuencia organizada que dice combatir a través de la ley. (O)

Luis Roberto Sánchez

Sí, estoy completamente de acuerdo con la propuesta del presidente Daniel Noboa, porque la apertura de los casinos podría generar puestos de trabajo en nuestro país que tanto se necesitan. (O)

Ángela Flores Conforme

Mi respuesta es no, no estoy de acuerdo. Ya bastante hay con lo que nuestro país está soportando en estos momentos como para que se abran casinos y sitios de apuestas, que lo único que hacen es hundir más la economía maltrecha de los ecuatorianos. Además de que, en mi opinión, muchos de estos sitios no trabajan con honestidad y es un caldo de cultivo para que familias desesperadas dejen su poco dinero en estos lugares. (O)

Jhoney Andrade

Estoy completamente de acuerdo. Ya que estos lugares son una buena fuente de ingresos y puestos de trabajo; además, en varias ciudades del mundo se pueden encontrar estos sitios, los cuales pueden incluso aumentar el turismo. (O)

Enrique Vanoni

Espero que no restablezcan los casinos, pues incrementan la ludopatía, representan, en cierta medida, focos de corrupción y fomentan vicios como el alcoholismo y el tráfico de drogas. (O)

Jofre Rodríguez

Sí, estoy de acuerdo con el retorno de la actividad de juegos de azar, siempre y cuando estén controlados y se prefiera mano de obra ecuatoriana. (O)

John Moreira

Sí, estoy de acuerdo con la propuesta de abrir de nuevo los casinos y las salas de azar, siempre y cuando estos lugares sean regulados de manera correcta. (O)