La expulsión de 1.500 presos extranjeros que tengan condenas en firme de al menos cinco años fue anunciada por el Gobierno para reducir el hacinamiento en los centros de rehabilitación del país y el gasto público, además de mitigar la violencia.

Unos 1.500 presos extranjeros van a ser expulsados del país, anunció el presidente Daniel Noboa

Sin embargo, de acuerdo con las declaraciones del presidente Daniel Noboa, esta decisión o las fechas de ejecución no dependen solo de Ecuador.

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De sus expresiones se desprende que usará la figura de la deportación. La Cancillería ya ha hecho contactos con Perú, Colombia y Venezuela, de donde es originario al menos el 80 % de los 1.500 presos extranjeros que han cometido delitos graves, anticipó.

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Estas son las figuras legales que puede aplicar el presidente Daniel Noboa para la expulsión de presos extranjeros

Datos históricos detallan que la deportación se empezó a utilizar en el país en 1837. En esa época se aplicó a personas que cometían delitos graves, particularmente políticos.

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Hoy el Ecuador ocupa el lugar undécimo en la lista de los países más peligrosos del mundo, según Global Organized Crime Index 2023. La violencia lo ha llevado a ese sitial doloroso y el Gobierno se comprometió desde su inicio a luchar contra ella.

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La medida de la expulsión puede encontrar trabas en los países de origen de los privados de libertad, mas el trabajo diplomático será clave en esta iniciativa, que además debe contribuir a frenar brotes de xenofobia que se han observado. Uno evidente fue la marcha en Pelileo (Tungurahua), el 5 de diciembre, cuando arrastrando monigotes se exigió la salida de todos los extranjeros.

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Los ecuatorianos también han emigrado y saben lo que significa. Las manifestaciones recientes son muestra de la angustia que genera la violencia, que es a la que se debe atacar. Por ello la importancia de que desde el régimen camine su plan contra los que representan un peligro para la convivencia pacífica.

Está bien el acercamiento con gobiernos locales, el tema de las cárceles, sin embargo también hay que hacer un control fronterizo permanente y efectivo para que no se filtren las malas personas. (O)