Semanas atrás, expresaba parabienes y éxitos a las nuevas autoridades elegidas en el último proceso electoral (5 de febrero de 2023) para manejar las riendas de sus pueblos, en especial al nuevo alcalde de Portoviejo. Enunciaba que en sus hombros descansan los anhelos de un pueblo que democráticamente se expresó en las urnas y eso había que respetarlo, apoyarlo con ideas y planteamientos, pero sobre todo permitir gobernabilidad. Todos aquí conocemos el lamentable atentado que sufrió el alcalde electo, noticia que causó preocupación, terror; incluso en otras filas, sin embargo, lo primero que hicimos fue expresar nuestra solidaridad y deseos de pronta recuperación.

Medito el proceder de los últimos días. Nuestros padres en todo su cúmulo de virtudes y errores nos enseñaron la importante lección de saber ganar, pero mucho más de saber perder. En este caso, reconocer que debemos exponer nuestra madurez, inteligencia, saber escuchar y aceptar la voz del pueblo, que es la voz de Dios. (O)

Gustavo Orley Cedeño Villavicencio, Portoviejo