Es, para decir poco, risible la reacción de los asambleístas de la RC, opuestos al Gobierno, con sus gritos y reclamos en la sesión inaugural y resentimiento posterior por sentirse relegados al no ser parte de los elegidos como autoridades de la Asamblea Nacional.

Los nuevos funcionarios públicos deben ser eficientes

Me gustaría regalarles a estos asambleístas Fitina, el remedio usado antiguamente para ayudar a la memoria, pues estos señores parecen sufrir de amnesia.

Tan pronto han olvidado cómo se comportaron ellos cuando, durante los gobiernos de la Revolución Ciudadana, eran mayoría en la Asamblea y los asambleístas de la oposición no tenían ni voz ni voto, prácticamente no existían para ellos y se apropiaron prácticamente de la Asamblea. Llegaron a tal extremo de autoritarismo que voces de su mismo grupo político que tenían el atrevimiento de disentir eran acalladas castigándolas.

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Control patrimonial de los asambleístas

Es interesante cómo ahora los miembros de esta agrupación se rasgan las vestiduras por sentirse relegados. Como que ahora les tocó saborear una cucharadita de su propia sopa. (O)

Nelly Lozada García, Guayaquil