Considerando que el tema de la seguridad ciudadana nos involucra a los habitantes de esta ciudad y todo el país, dado que la percepción de la seguridad es el termómetro que muchas veces marca la gestión de los organismos llamados a trabajar en coordinación para brindar esa sensación de seguridad, ya que la delincuencia parece imparable frente a las estadísticas de delitos que tienen relación con portar ilegalmente armas (más del 80 %, el componente es dos personas en motocicletas y al menos una de ellas porta un arma de fuego); agradeceré implementar el siguiente control:
A más de la obligatoriedad de portar placas en las motocicletas, los usuarios –sean uno o dos pasajeros– deben tener en sus cascos impresa la placa correspondiente al vehículo (esto se empezó a implementar en Guayaquil pero la pandemia detuvo la resolución); deben usar un chaleco reflectivo y en la espalda también tener la identificación alfa numérica correspondiente a la placa de la moto que están usando (medida implementada en otros países). De esta manera se podrá reducir drásticamente el uso de estos medios para delinquir, ayudando al control que realizan las autoridades; asimismo, se disuada fuertemente el hurto de estos vehículos livianos para usarlos en esas actividades, y se colaborará por medio del sistema integrado de cámaras que opera en Guayaquil, en el seguimiento a quien realiza actividad ilícita. Las estadísticas y los ejemplos de los actos delincuenciales violentos y con uso de armas de fuego que aprovechan delincuentes por las debilidades existentes en los controles, se ven día a día; por lo que pongo a consideración mi recomendación a fin de que sea canalizada por las autoridades y quizá pueda extenderse al resto del país. (O)
Marcelo Javier Sáenz Torres, Guayaquil