Las cárceles ecuatorianas son bastiones de poderosas bandas del narcocrimen organizado, tienen la mejor tecnología de comunicación, armas, telefonía, tablets, drones, internet, equipos, etc.; guardan dinero, balas, armamentos, drogas...; tienen personal, gentes, testaferros, que trabajan para ellos con eficaz libertad.

Piensan construir más cárceles dada la delincuencia nacional. Deberían hacer reingeniería de las administraciones y personal carcelario corrupto, si no seguirán la corrupción, los motines. (O)

José Antonio Gamarra, Machala