Es difícil caminar por las aceras de las ciudadelas Miraflores y Urdesa.
La Municipalidad de Guayaquil ha trabajado mucho y bien en cuanto al arreglo de las calles asfaltándolas, de los baches; pero ha omitido poner su mirada en las aceras, no todas están al mismo nivel, luego estas han sido convertidas en rampas para acceder a garajes, cuando se debería hacer según la ordenanza, afuera de la acera y con asiento en la calle poner rejas. También hay aceras pedrosas en las que ha desaparecido la capa de enlucido, lo que además se encuentra en otras ciudadelas como en la Bolivariana, en la acera frente a la iglesia. El Municipio debería obligar el arreglo de las aceras a fin de que todas sean de un mismo nivel, si no lo hacen propietarios de viviendas, efectuarlo por medio del Departamento de Obras Públicas o el que fuere y emitir el título del valor del trabajo correspondiente, y si no se paga por parte de los propietarios de los inmuebles, cobrarlo por vía coactiva; estimo que eso lo agradecerían también los adultos mayores y las personas con discapacidad. (O)
Lisbeth Vanoni, Guayaquil