Aun en situaciones difíciles siempre será posible como sociedad generar logros para el futuro. Lo ocurrido en la cuestionada contratación de insumos médicos para el IESS, donde los ciudadanos del país unidos detuvimos un indignante caso de corrupción, revela que las crisis pueden sacar lo peor ,pero también lo mejor de quienes integramos un conglomerado social.

Ante la difusión en los medios de comunicación no es necesario reseñar el caso, los ecuatorianos ahora esperamos de las autoridades resultados rápidos y concretos en las investigaciones y sanción ejemplar para los responsables porque la transparencia y probidad en el manejo de los recursos públicos es indispensable para la subsistencia de una sociedad organizada, pero bajo el estado actual de cosas es esencial, cada dólar puede hacer la diferencia para salvar la vida de un enfermo, por tanto no podemos tolerar actos de corrupción y menos su impunidad.

Comprendamos que ante esta pandemia todos los recursos son indispensables, diariamente existen enfermos de todas las edades que enfrentan la muerte en hospitales públicos y privados del Ecuador y los necesitan con urgencia.

Compatriotas, debemos sentirnos orgullosos de haber sido parte de la más grande veeduría ciudadana de la historia republicana del país, lo hicimos por ti Ecuador, confinados en nuestros hogares por la salud y la vida de nuestro prójimo, lo hicimos por quienes partieron y nunca regresarán junto a nosotros, pero con la certeza de que sus familias encontrarán consuelo al mirar con optimismo el renovado país que, Dios mediante, surgirá cuando superemos esta tragedia y que pese a las incalificables acciones de unos pocos desalmados, los ecuatorianos tenemos fe en que lo levantaremos, unido en la diversidad, renovado en sus valores eternos y dispuesto a construir para las grandes mayorías; una sociedad más solidaria, Patria fraterna en la cual juntos volveremos a soñar. (O)

David G. Rodríguez Ycaza,

doctor en Jurisprudencia, Guayaquil