Ya hace más de quinientos años que los rapaces conquistadores llegaron a este territorio que hoy constituye el Ecuador y en el transcurso de ese tiempo más de doscientas generaciones se han alternado en el devenir de los siglos, de manera que en la actualidad no somos ni los conquistadores ni los conquistados y formamos una raza distinta del uno o del otro grupo. Sin embargo, una minoría que no llega ni al 7 % de la etnia conquistada se niega a reconocer la realidad, y asesorada por un grupo heterogéneo que no representa ni a los unos ni a los otros, siguen hablando de que “somos un país plurinacional”, con idioma, costumbre y religiones distintas. Ciertos políticos inescrupulosos, lamentablemente, en el devenir de la historia han auspiciado a dichas minorías, han plasmado en la Constitución de la República estos principios absurdos que envalentonan a ciertos individuos que se hacen pasar por indígenas, para insultar, saquear, amedrentar y cometer actos de vandalismo cada vez que se les antoja, en detrimento de la paz pública, de la seguridad de las personas y de los bienes públicos y privados. Tenemos la obligación los ecuatorianos, todos, que formamos esta nueva raza que no tiene nada que ver con la que se dejó arrebatar sus dominios ni con la otra que vino “a hacer la América” después de saquear y dejar saquear a su vez su propia península, por otras etnias rapaces que desgraciadamente siempre han asolado al planeta Tierra. Debemos obligatoriamente tener como divisa que el actual Ecuador no es ni indígena ni español, y que formamos una etnia distinta que busca el engrandecimiento, la paz y el bienestar de sus hijos. En conclusión: Todos somos ecuatorianos, indígenas, mestizos, blancos, negros, asiáticos, fenicios, etcétera; y todos los nacidos en estas tierras y los que han vivido las penurias y a veces las bondades que ofrece nuestra patria. ¡Aquí no hay etnias privilegiadas, todos somos iguales y nos tenemos que someter a las mismas obligaciones y derechos, sin pretender tener ventajas por ser descendientes de indígenas, o de africanos, europeos, asiáticos, etcétera, que hayan emigrado de sus tierras y hoy vivan en territorio ecuatoriano!(O)

Efraín Vásquez Landívar,

doctor en Jurisprudencia, Guayaquil