El día 7 de mayo del 2015 (cuatro años ya cumplidos) fui objeto del robo de mi vehículo usadito pero en buen estado, dentro del parqueo privado de un hipermercado del norte de la ciudad. Luego de hacer las averiguaciones con los guardias y con la administración del local, lo único que hicieron fue enseñarme, junto a los policías que llegaron a ver el video de la cámara de seguridad, que un sujeto de un aspecto grueso salía con mi vehículo del local comercial.
Realicé la denuncia, cayendo mi caso en la Fiscalía DACE 1 y de ahí empezó mi calvario. Lo primero que la autoridad fiscal pidió al lugar donde sucedió el robo fueron los videos de seguridad que todos los vimos, y hasta la presente fecha representantes de ese local han dado varias excusas, desde que las cámaras estaban “dañadas”, que los videos “se borran cada quince días”, etcétera; todas esas declaraciones y excusas están en el expediente de la investigación previa que tiene dos cuerpos (carpetas), incluida la versión de los testigos, los informes de la Policía Judicial, de Criminalística, etcétera. Toda la investigación se ha realizado durante estos cuatro años y ni aparecen mi carro ni los vídeos. He solicitado a todos los fiscales que revisaron mi expediente que siga la formulación de cargos y hasta la presente fecha dan largas al tema. Cansada de estas injusticias el 6 de mayo del presente año presenté una carta a la fiscal general del Estado, doctora Diana Salazar, en la cual le explicaba mi caso que nadie lo resuelve; teniendo como contestación de la Dirección de Gestión Procesal de la Fiscalía General del Estado, de Quito, que tenía tres días para llenar el formulario para la presentación de reclamo, y por supuesto debía de leer y saber el instructivo para la recepción y admisión de requerimientos y reclamos externos sobre asuntos de competencia de dicha Dirección. Entiendo y estoy de acuerdo con tantos pasos y procedimientos legales que hay que hacer, ¿pero esto es una justicia eficaz, pronta y de celeridad, como dice la Constitución? Ojalá el fiscal de la Unidad DACE 1 resuelva mi caso y no quede en la impunidad.(O)
María de Fátima Guerrero Román,
Durán, Guayas
