El domingo 24 de febrero de 2019 otra vez cerraron la calle Víctor Emilio Estrada en la ciudadela Urdesa central para que todo Guayaquil vaya a andar libre en bicicleta.

Es la segunda vez que hacen este “programa deportivo”. Lo que se ha visto es que no solo ocupan la calle ciclistas sino que van a mucha velocidad por las veredas, en triciclos, patines, monopatines, bicicletas; adultos y niños. Usted va caminando por la vereda, cuando lo pasan rozando, casi atropellan o hacen caer, y si se bota a la avenida Víctor Emilio Estrada también pasan más ciclistas a mucha velocidad.

El domingo 24 hubo menos gente que la primera vez que hicieron el “programa”. No solo es un paseo para pedalear, porque personas llegan de otros barrios y de fuera de Guayaquil con perros pequeños, y grandotes, muchos dueños sueltan a los animales para que corran, a los dueños no les hacen nada, pero a un extraño le pueden saltar encima o pueden atacar. Los dueños están atrás y los animales van corriendo una cuadra adelante.

Los “programas” los han hecho día domingo que es para el descanso. Ponen desde tempranas horas de la mañana tarimas, hacen ruido, prueban todo el volumen de los equipos de sonido. Las voces por los micrófonos decían a los urdesinos “levántense, levántense para salir a su ciclopaseo, usted lo puede realizar gracias a la ATM”. Después la voz de mujer gritaba “... para iniciar vamos a hacer calentamiento previo..., manito derecha, brazo izquierdo, derecha, izquierda, arriba, abajo, vuelta el lado derecho para el otro lado, hombros arriba, abajo...”. Causó dolor cabeza y por más del cierre de las ventanas fastidió el ruido hasta pasado el mediodía. Es una falta de respeto a los moradores y a los adultos mayores que desean dormir un domingo. Vayan a hacer sus “shows y programas” a explanadas en Samanes, antiguo aeropuerto o bien a Mocolí, donde existe urbanización con parques y grandes áreas verdes elegantes.(O)

Pedro Pablo García,

Guayaquil