Científicos y teólogos se han enfrentado por no distinguir, sin contraponer, sus respectivos campos.

Quienes son científicos no buscan notoriedad, oponiendo a Dios y al hombre. Por ejemplo, “Einstein decía que no creía en un Dios personal; pero cuando hablaba de él, lo hacía de una manera muy personal, como si fuera un amigo”.

Para enfatizar la importancia religiosa del descanso sabático, se afirma en el Génesis que hasta Dios descansa y pide al hombre honrarle, continuando su obra.

El científico William Daniel Phillips, Premio Nobel de Física 1997, dice: “La Biblia no es un libro sobre los orígenes científicos del universo, sino sobre nuestra relación con Dios y la relación que quiere tengamos entre nosotros”. Dice: El universo empezó hace 13.700 millones de años y ha estado evolucionando todo este tiempo…”.

“La Biblia está llena de poesía y de metáforas”. El salmo 23 dice que Dios es nuestro pastor…; no quiere decir que va con un bastón y nos hace entrar en un corral”.

El origen del universo, especialmente el origen de la humanidad, no es un tema científicamente cerrado. La ciencia misma relativiza la teoría de la evolución: Darwin, evolucionista por excelencia, estaba perplejo por la ausencia de especies intermedias.

Científicos como David Thaler y Mark Stoeckle afirman que 9 de cada 10 especies animales en el planeta no evolucionaron, sino aparecieron más o menos en el mismo tiempo.

Del análisis de 100.000 especies esos científicos llegan a la conclusión de que la mayoría de estos animales han aparecido simultáneamente.

“La Iglesia católica nada tiene en contra de la teoría de la evolución”. Pío XII y Juan Pablo II afirman que el mismo ser humano, en cuanto cuerpo, podría ser producto de una evolución. Lo que no se acepta, ni es aceptable, es la teoría evolucionista, según la que el alma humana es producto de la sola evolución.

Si hubo evolución, el alma fue infusa por Dios en un determinado momento.

En consecuencia, el origen del hombre sigue siendo sobrenatural; la relación con Dios sigue siendo centro de su existencia y su primacía sobre los seres creados, o evolucionados, sigue siendo real.

La evolución no es la última palabra en la historia de la humanidad.

¿Quién es Dios, según William Daniel Phillips? Dios es más que una expresión del orden, de la armonía y belleza del universo. “Dios se preocupa de mí, de ti, de todos nosotros de una manera personal”. Lo que es más que decir que Dios es Creador.

“Se manifiesta en las relaciones de amor entre la gente. Un ejemplo es lo que pasó en la cueva de Tailandia: la gente llegó de todo el mundo, para salvar a aquellos niños que habían quedado atrapados”. La gente en vez de actuar según su propio interés, actuó más allá de ese interés. Hizo descubrir que el amor evoluciona la humanidad; el egoísmo la involuciona hacia una etapa de mera animalidad:

-El aborto, que es supresión encubierta de un ser humano indefenso.

-Uniones sexuales entre niños. “Poderoso caballero es don dinero”.

(O)