Las adicciones en los últimos años en Ecuador han tenido un índice muy alto en consumo de drogas o alcohol, dañinos para la salud de nuestros jóvenes, lo cual cada día los destruye... pero no se ha tomado prevención de que vivimos en una sociedad hipersexualizada y, por ende, una adicción más es el consumo de pornografía, lo que provoca una conducta agresiva y pésimas relaciones interpersonales. La pornografía es considerada como una nueva droga: el cerebro presenta el mismo daño y peor si se acompaña con la masturbación. Muchas personas ven estas prácticas como algo normal y educación sexual, pero el porno insulta al sexo, como lo dice una publicidad de una empresa en España que se dedica a ayudar a la gente a salir de este vicio.
La industria pornográfica vende una farsa que lo único que provoca a los jóvenes es ansiedad y frustración, porque existen personas con el deseo de salir pero se encuentran muy desmotivadas, ya que la dopamina y cortisol se les disminuye al consumir estos videos que llegan hasta tomar decisiones fatales. Los padres, maestros y la sociedad en general deben tomar mayor atención en estos casos. (O)
Vanessa Triviño Burbano, Guayaquil