El medio electrónico se ha convertido en un blanco para cometer actos ilegales tales como extorsión, robo, fraude, suplantación de identidad, entre otros. La delincuencia informática es difícil de comprender o conceptualizar plenamente, a menudo se la considera una conducta relegada por la legislación, que implica la utilización de tecnologías para la comisión del delito.
La investigación de la delincuencia informática no es muy fácil, la mayoría de los datos probatorios son intangibles y transitorios. Los investigadores de delitos cibernéticos buscan vestigios digitales que de acuerdo a sus características suelen ser volátiles y de vida corta. Internet brinda beneficios a los usuarios, pero su fácil acceso también podría perjudicarlos. El uso extendido de la telefonía móvil y de internet ha dado lugar a nuevas modalidades de acoso escolar o bullying. Las víctimas ahora son doblemente perturbadas, dentro de la clase y fuera de ella. La intimidación mediante SMS, correos electrónicos anónimos o páginas webs difamatorias es cada vez más habitual por los acosadores. Los adolescentes se sienten atraídos por la tecnología y se desenvuelven con ella a la perfección. Los jóvenes con personalidad agresora se valen de esos medios –además de los tradicionales– para perturbar a sus compañeros. Una posible solución viene del hogar, la educación que da para prevenir este tipo de comportamiento; se está perdiendo el valor de respeto a terceros.
El ciberbullying o el ciberacoso se define como las burlas o los rumores que le puedan propagar unas personas a otras, a través de las redes sociales; pueden dejar profundas cicatrices emocionales, depresión, bajo rendimiento escolar, pérdida de interés en la socialización y provocar el suicidio en niños y adolescentes. ¿Cómo evitarlo?, teniendo cuidado con la información personal que comparte en línea incluyendo el correo, los sitios de redes sociales como Facebook y Twitter, y las salas de chat. Es fácil deducir información del lugar donde vives, los sitios que te gustan visitar y las personas que te importan, a partir de las imágenes y los comentarios que publicas. Crea una cuenta de correo diferente para registrarte en los sitios de redes sociales y otros espacios en línea. Te servirá para evitar el spam y tu correo personal no será revelado si el servicio en línea no cuenta con buenas prácticas de protección de la privacidad. No te sientas obligado a completar todos los campos cuando te registras en línea, ni a brindar información que pueda identificarte como fecha y lugar de nacimiento, en los campos obligatorios. En tu perfil de usuario, utiliza una foto que no te identifique y no sirva para identificar el lugar del que procedes, así no te reconocen. Considera la posibilidad de utilizar un nombre que no sea el tuyo real o un sobrenombre para tu correo electrónico, nombre virtual o usuario, y no usar fechas importantes como tu cumpleaños, para tu contraseña, utiliza un nombre que sea neutro en términos de género y de edad. Haz de cuenta que tu correo y tu cuenta de internet son como tu documento de identidad, tu tarjeta de crédito o tu número de pasaporte y trátalos con mucho cuidado. Si te separas de tu pareja, sobre todo si es violento, problemático o si está enojado, cambia todas las contraseñas de todas tus cuentas, desde la de correo electrónico y las redes sociales hasta la del banco, y usa algo que tu pareja no pueda adivinar.
Dentro del nuevo COIP (Código Orgánico Integral Penal) se establece el delito contra la información pública reservada y la suplantación de identidad; todavía es incipiente en relación con lo que se necesita, por lo que la principal labor a realizar es en el hogar, en el seno familiar.
Erwin D. Chiluiza Rodríguez, ingeniero de Sistemas y abogado, avenida Samborondón