La calificación la escuché por Radio Centro el último viernes, en un panel plural sobre la posible explotación de áreas del Yasuní.

¿Será acertada? Revisémosla pasando revista a temas actuales.

El ‘posextractivismo’

La expresión fue acuñada por sectores ecologistas de la izquierda ecuatoriana, contra la extensión de la explotación petrolera y minera. Alberto Acosta fue vocero de aquellos y la potenció en la campaña de Rafael Correa del año 2006, como propuesta de gobierno. Acosta ya ministro de Energía y Minas, en mayo del 2007 anunció la opción de no explotar las reservas del ITT, denunciando la oposición de quienes, en el mismo gobierno de Correa, estaban en Petroecuador (EL UNIVERSO, mayo 20, 2007). Correa respaldó a su ministro y se lanzó la iniciativa. El presidente en enlace de agosto 17, 2013, expresó: “La iniciativa Yasuní-ITT fue de su servidor, del presidente de la República”.

La iniciativa planteó el compromiso del Ecuador de no explotar 846 millones de barriles de reservas probadas de crudo pesado en el campo Yasuní-ITT (Ishpingo-Tambococha-Tiputini), contra una parcial compensación económica, vía donaciones de gobiernos y entidades de todo el mundo.

Verdad que desde el inicio se habló de un plan B, pero no como un plan virtuoso, sino como aquel al que se vería condenado el Ecuador, de no aceptarse la iniciativa.

‘Métanse por…’

En enero del 2010 se rompe el proceso. Quienes podían ser proveedores de fondos habían planteado estar en el directorio del Fideicomiso, en que se acumularían los fondos, la respuesta de Correa fue: “Métanse sus centavos por las orejas”.

La consecuencia: la renuncia de los comisionados para impulsar la iniciativa, Roque Sevilla, Yolanda Kakabadse y Francisco Carrión. Además, coincidió la salida del canciller Fander Falconí.

Con los nuevos comisionados, la iniciativa B fue mutando de que “no quedaría otra cosa” para ser virtuosa: “Afectación que no llegaría al uno por mil del Parque Yasuní”.

¿Era esperable que avance la iniciativa Yasuní-ITT, si solo habría la mínima afectación que se anuncia sería la del plan B?

A los gobiernos y entidades que se esperaba sean proveedores de recursos para la iniciativa, Correa los acusa del fracaso expresando que “el mundo es una global hipocresía”. Realmente acogieron su mensaje del 2010: “métanse sus centavos por las orejas”.

¿Vamos a la consulta por el Yasuní?

Recoger firmas para la pregunta elaborada por Julio César Trujillo –supuesto que sea calificada por la Corte Constitucional– y luego procesarlas, llevará hasta marzo del 2014, cuando habrá elecciones para gobiernos seccionales el 23 de febrero del 2014.

El Consejo Nacional Electoral está sugiriendo que en el mismo proceso se vote gobiernos seccionales y consulta del Yasuní, lo que de asumirse como tesis del Ejecutivo llevaría a este a formular la pregunta que no será la de Trujillo, sino que podría ser: “Está usted porque siga la pobreza por no explotar el uno por mil del Yasuní?” u otra parecida.

Además, el presidente ya anunció otra pregunta para que no haya periódicos impresos en papel, a fin de que en el mundo no se talen bosques de donde salga la celulosa para su fabricación. Debe ser una ironía del presidente contra los periódicos que no se le alinean –quizás ya controla el 40% de los medios no escritos, a más de los enlaces y espacios obligatorios en los no controlados–.

No creo que abandonado el “posextractivismo” se pase a promover “la era de posimpresos”.

El presidente en campaña

¿Cuándo no lo está? Desde el 2005, cuando entró al Ministerio de Economía no ha parado de hacer campaña.

Las presidenciales, las consultas, las seccionales son una continuidad. Ya está en campaña contra Nebot en Guayaquil y se multiplicará su presencia en el Ecuador.

También en otras elecciones. En el enlace del 17 de agosto, expresó que en la semana que concluía había almorzado con excompañeros de la Universidad particular San Francisco de Quito, “gente muy amiga como profesores, personal de servicio de guardianía y conserjería” (…) “El dueño de la USFQ nos odia, cada vez que hay un paro o algo, pone los buses para traer a los chicos acá, pero yo les aseguro que le gano las elecciones en la San Francisco, todo el mundo detesta a ese tipo”. Una explicación necesaria, el presidente se refiere a la próxima elección de rector de dicha Universidad, actualmente Santiago Gangotena, a quien tacha de “el dueño”, que lo acogió años atrás y docente en esta aplicó a la beca que obtuvo en la Universidad de Illinois.

Assange, Manning y Snowden

Correa estudió en Illinois, pero siempre un teórico antiyanqui. El canciller Patiño además militante antiyanqui.

Los dos han asumido como tesis de soberanía el patrocinio y la defensa de contradictores del poder yanqui.

Para analistas, esto ha afectado a las relaciones de comercio con Estados Unidos. No solo el ATPDEA y en el Sistema Generalizado de Preferencias, sino también la injusta represalia del nuevo arancel impuesto a los camarones de origen ecuatoriano. Como la explicación está en la soberanía, se incrementa la carga del gasto público en el Ecuador a fin de compensar a los exportadores en las pérdidas que van a afectarles.

Y el puerto de Guayaquil

El tema entra en la campaña para la Alcaldía de Guayaquil.

Acusar el costo del dragado para que su historia portuaria quede atrás, y su destino portuario privilegie el cabotaje y el turismo, es una insensatez.

Para el ingreso a Guayaquil debe haber la vía marítima que le asegure sus flujos comerciales y otros vinculados con la actividad portuaria.

¿Será posible que se abandonen gruesos y ofensivos calificativos?, parece imposible, cuando se privilegia ofender al contradictor.

Pero, en lo del fondo del puerto de Guayaquil, ojalá prime la sensatez.

No creo que abandonado el “posextractivismo” se pase a promover “la era de pos-impresos”.