Galo Herrera, un hombre de 64 años, resultó gravemente herido luego de sufrir un aparente intento de robo a las 04:00 de este martes, 8 de marzo, en la cooperativa Lotes con Servicio Alegría, en el norte de Guayaquil.
Según versiones preliminares, por evitar ser asaltado el conductor se habría impactado con su vehículo contra un poste de alumbrado eléctrico, en la manzana 1583.
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Producto del choque, la parte frontal del automotor quedó destrozada y el poste inclinado hacia la calle.
Vecinos del lugar dijeron haber escuchado detonaciones presuntamente de arma de fuego. Tras el choque contra el poste una persona se bajó del auto y se retiró del sitio, mientras Herrera quedó herido.
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Según reporte policial, la víctima habría sido perseguida por antisociales que se trasladaban en dos motocicletas.
Familiares del hombre contaron que fue llevado al hospital Abel Gilbert, en el suburbio, donde por la gravedad de su estado lo intubaron. Aparentemente, relataron, el hombre habría recibido un disparo en la cabeza.
Uniformados de la Policía acudieron al lugar para hacer las pericias de rigor y determinar cómo se produjo el hecho.
Un allegado al conductor mencionó que esta sería la segunda vez que Herrera sufre un intento de robo en el mismo sector, que es cercano a donde él vive.
Hace dos meses también le habrían intentado robar, comentó el allegado, quien señaló que la calle de la manzana 1583 es oscura, que las luminarias que hay allí no sirven. Eso fue corroborado por los moradores del sector que mencionaron que escuchan andar motos en la noche e incluso durante la madrugada.
El hombre de 64 años se dedica al servicio de transporte y usualmente sale desde la madrugada ya que tiene clientes fijos a los que transporta desde temprano.
Moradores de la cooperativa Lotes con Servicio Alegría mostraron hermetismo ante la situación, pero pidieron más patrullaje policial.
Pasadas las 09:00 se conoció que el conductor murió en el hospital, pues no resistió la gravedad de la herida.
Con este asesinato en la Zona 8 integrada por Guayaquil, Durán y Samborondón ya suman más de 240 crímenes, una cifra tres veces superior a la reportada en el mismo lapso del año pasado.