En enero de 2020, el guayaquileño Víctor Huerta Jouvín, de 46 años, fue extorsionado con una supuesta denuncia de violación y, cinco días después, lo secuestraron en el centro de Guayaquil. Ahí empezó la ‘pesadilla’ que narra en su libro Señuelo 17, cuya segunda edición lanzó en julio.