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Herramientas de los talleres fueron utilizadas por reos para desmembrar a sus compañeros de prisión en Cuenca

Durante la mañana y tarde de este jueves no se presentaron novedades y el resguardo policial y militar se duplicó en Turi

Militares se mantienen en los exteriores de la cárcel de Turi, en Cuenca. Foto: Johnny Guambaña

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Una amoladora y decenas de armas artesanales fueron las herramientas que usaron los privados de la libertad del Centro de Rehabilitación Social de Turi para atacar y desmembrar a sus compañeros de prisión.

La tarde de este jueves, el director del Centro, Rómulo Montalvo, indicó que “desde el momento que se habilitaron los talleres hay herramientas, lastimosamente rompen una seguridad, los candados y sacan esta herramienta”, no sabe cómo, y completó su respuesta al decir que “ellos se dan modos”.

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El fiscal del Azuay, Leonardo Amoroso, dijo la mañana de este jueves que fueron los reos de mínima y mediana seguridad los que atacaron a los de máxima B. Sobre cómo salieron para cometer la masacre Montalvo respondió: “Esto se da porque se activan los talleres, ahí aprovechan el momento que sale el personal para hacer sus actividades normales de educación para vulnerar la seguridad con los agentes de seguridad penitenciaria y tomar el control para trasladarse al otro pabellón”. Justamente, los talleres y áreas educativas están ubicadas frente al área del ataque.

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Además contó que antes de proceder con el ingreso de los policías su primera reacción fue evacuar al personal administrativo y de visitas que estaban presentes a esa hora.

Si bien la situación dentro y fuera del centro carcelario estuvo calmada la mañana de este jueves, la autoridad afirmó que están en alerta máxima porque en cualquier momento puede activarse. Mientras tanto, trasladó a 37 internos a otras provincias para evitar que la violencia se reactive. Asimismo, otros reos que resultaron heridos siguen bajo vigilancia médica y militar en un sanatorio de Cuenca.

Desde temprano las autoridades de Cuenca y de la provincia del Azuay se reunieron en el edificio del ECU911 para participar de un Comité de Seguridad y analizar la crisis carcelaria que vive el país.

El gobernador del Azuay, José Jaramillo, dijo que entre las resoluciones del comité de seguridad se decidió reforzar la seguridad en la cárcel y reorganizar operativos.

El último miércoles, el alcalde de Cuenca, Pedro Palacios, presentó una serie de pedidos, entre esos volver a la cárcel de Cuenca regional y que le entreguen la lista de los internos para saber si son oriundos de Azuay, Cañar y Morona Santiago. Sobre ello, Jaramillo respondió que “están haciendo el análisis, que la priorización es la seguridad dentro del centro y las zonas aledañas”.

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Antes de ser llevado por sus asesores de regreso al ECU911, Montalvo afirmó que se mantendrá en su cargo “hasta que Dios no disponga otra cosa”. (I)

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