Manta, MANABÍ

Sara Sabando, madre de Naomi Arcentales, la mujer que murió en circunstancias aún no esclarecidas el pasado 12 de diciembre en un departamento de un hotel cinco estrellas en Manta, insistió en que se trató de simular el presunto suicidio y que se puso un cable.

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Ella junto con Ray Arcentales, padre de Naomi, y Luigi García, abogado defensor de dos causas que se siguen en este caso, solicitaron esta mañana en una rueda de prensa que la Fiscalía General del Estado (FGE) formule cargos en contra de la expareja de su hija, sospechoso y señalado en las dos acusaciones.

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García habló de una presunta negligencia de parte de la FGE, pues dijo que pese a que han presentado los elementos necesarios de convicción, que alega son graves, no existe una reacción del organismo judicial.

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Agregó que las 16 diligencias realizadas les confirman a ellos que la muerte de Naomi Arcentales no fue un suicidio, como se lo pretende establecer, sino que sería un femicidio.

El abogado defensor cree que habría un espíritu de cuerpo por parte de FGE, pues no logran entender que pese a todas las pruebas presentadas no se presente una formulación de cargos contra la expareja de la víctima, quien labora como fiscal en Manabí.

“Por la forma como se dio el delito y específicamente por cuanto el principal sospechoso es un miembro más de la FGE, es a este organismo a quien exigimos respuestas, porque el caso Naomi debe ser un precedente para que no se den más femicidios”, declaro García.

Sabando mostró varias fotografías inéditas captadas tras la muerte de su hija Naomi, en donde se observa el cable que rodeó su cuerpo y con el que supuestamente se habría suicidado.

En su intervención, Sabando indicó que su hija no sabía amarrar ciertos objetos, y por ello le parecía raro que tuviera un nudo que según ella es realizado por personas asociadas a actividades deportivas e incluso asociadas al mar.

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De su parte, Ray Arcentales dijo que su hija nunca le presentó a su pareja, y lamentó que, pese a que hay pruebas del maltrato que sufrió su descendiente (video donde se mostró que era agredida), esa investigación por violencia doméstica que se sigue en Manta tampoco tenga resultados por parte de FGE.

“La segunda autopsia es completamente diferente a la primera. Es lo único que les puedo decir”, señaló Sabando, quien no quiso indicar si en la muerte de su hija habría otras personas relacionadas.

García agregó que, por el tipo penal, la ley prevé que la investigación previa puede durar hasta dos años; y, en ese lapso, la FGE o bien solicita el archivo de la investigación, o formula cargos en contra del principal sospechoso.

“Pero eso no significa que debemos esperar dos años (…). El caso en Quito es investigado por la fiscal Mayra Soria, pero el pedido no es solo para dicha funcionaria, sino contra la doctora Diana Salazar (fiscal general), para que exija que actúen con objetividad y que tomen la decisión que corresponda a derecho”, declaró García.

La parte defensora del fiscal involucrado y expareja de la víctima sostiene que lo único que se demostró en lo expresado por el abogado defensor y familiares de Naomi es que son mentiras; e incluso, irrespetando la ley, mostraron imágenes que no debían; y que, al contrario de lo que sostiene la familia de la mujer fallecida, la defensa del acusado ha reclamado a la FGE porque no ha sido lo suficientemente objetiva en la indagación.

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Julio César Cueva, abogado defensor del involucrado, indicó que, en lo actuado de momento en la investigación por la muerte de Arcentales, la FGE habría actuado “como le ha venido en gana”, y que ha practicado las diligencias que ha querido. Sostuvo que, si hasta el momento no ha formulado cargos, es porque ese organismo tiene claro que no hay elementos de convicción.

“Los casos no se ganan en las redes sociales ni en los medios de comunicación; se ganan en las cortes. Cuando yo veo que alguien va a los medios de comunicación con ruedas de prensa a mentir, porque lo único que yo he visto de este abogado (García) es mentiras, es porque saben perfectamente bien que no tienen ninguna verdad en el expediente y quieren obligar a través de la presión mediática a que se haga algo que la ley no permite, que es la de formular cargos contra una persona por la cual no hay ningún elemento de convicción”, declaró Cueva.

Dijo que su defendido ha colaborado con la investigación declarando dos veces, pese a que tiene el derecho a permanecer en silencio, y que ellos no se prestan para actos de autoincriminación.

“Cuando yo veo las diligencias que piden, son para hacer circo, y esto no es un circo. Nosotros somos serios; nosotros no vamos a prestarnos para hacer un circo (…). Incluso han llegado a mostrar evidencias fotográficas que por ley está prohibido que exhiban. No tienen ningún descaro; se sienten por encima de la ley”, recalcó Cueva.

El abogado indicó que todo lo mostrado hasta ahora es como una patada de ahogado, pues el abogado que defiende a la familia Arcentales-Sabando no tendría ningún caso y, como no lo puede ganar en las cortes, lo quiere hacer a través de la presión mediática. (I)