Casi 24 puntos cayó, en un año, la calificación a la gestión de la actual Asamblea Nacional: pasó de 34,5 % a 10,7 %, según la encuestadora Market. Cifras que reflejan la poca estima en que la ciudadanía tiene a la Función Legislativa a causa de los constantes conflictos políticos y el incumplimiento de sus roles constitucionales: legislar y fiscalizar.