A pesar de que la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea (MOE-UE), en su informe final de las elecciones generales de 2025, descartó evidencias de un fraude electoral en la segunda vuelta presidencial, la excandidata y dirigente del movimiento Revolución Ciudadana (RC), Luisa González, insiste en afirmar lo contrario.
En un pronunciamiento suscrito por González, ella reitera que existió un presunto fraude electoral en las elecciones generales de 2025 y cuestionó la legitimidad del Gobierno electo. En un pronunciamiento difundido este viernes, González aseguró que el proceso estuvo marcado por “graves irregularidades” y una “distorsión deliberada de la voluntad popular”.
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De su lado, el jefe de la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea, en una rueda de prensa realizada este 27 de junio, detalló una serie de sugerencias para debate de las autoridades electorales enfocadas en aspectos como fijar límites durante las campañas electorales para las actividades de la Presidencia y del Gobierno, la gestión de asuntos corrientes o de emergencia, el uso de la licencia sin sueldo para los candidatos que estén en un cargo de elección popular, controles para el financiamiento a la política y otros que fueron parte de los ejes principales que la MOE-UE abordó.
Pero González citó como respaldo el informe final de la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea, que según ella habría documentado “deficiencias estructurales” y vulneraciones a los principios democráticos.
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Entre las irregularidades más graves estarían vacíos legales y falta de sanciones efectivas; falta de independencia de las autoridades electorales; uso de recursos públicos para favorecer al oficialismo; ausencia de control en el financiamiento de campaña; cobertura mediática parcializada y propaganda encubierta; difusión de desinformación, incluso mediante inteligencia artificial; violencia política de género contra figuras opositoras; y déficit de educación cívica y capacitación electoral.
Una de las denuncias más inusuales tiene que ver con el uso de dos tipos de bolígrafos en los comicios: uno con tinta normal y otro con tinta transferible, que —según González— permitiría la alteración de los votos con papeletas previamente tratadas. “El CNE no ha investigado ni se ha pronunciado sobre este inexplicable hecho”, agregó.
Finalmente, hizo un llamado a la ciudadanía, a las autoridades nacionales y a la comunidad internacional para exigir una investigación seria sobre el presunto fraude, una auditoría electoral independiente, sanciones efectivas por el uso indebido de recursos públicos, reformas estructurales del sistema electoral, mayor educación cívica y combate a la desinformación. (I)