Pasa en la vida real, dice el médico Juan Carlos Sánchez, quien señala: “A través del ojo conseguimos la pista de muchos diagnósticos del cuerpo”.
Así responde Sánchez al impresionante caso de una mujer que recibió un mal diagnóstico al ir a verse con un especialista qué pasaba con su ojo derecho.
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La paciente, dado que no mejoraba, decidió no quedarse con esa sola valoración médica y en la segunda lo que le dijeron la descolocó.
Le sucedió a Ciaran Morgan, una mujer inglesa de 43 años.
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Estos son los primeros síntomas de un tumor en el cerebro
De un orzuelo a tumor
Morgan notó una inflamación en su ojo derecho. Además, tenía aspecto “lloroso”.
Creyó, señala Semana, que era alergia (fiebre del heno) o “un simple orzuelo”. En la consulta con una oftalmóloga, esta “le indicó que no era algo de gravedad”.
La profesional, de acuerdo con The Sun, y reseñó La Nación, en 2020, “le recetó diversos antibióticos y le dijo que solo se trataba de una reacción alérgica.
El tratamiento no funcionó. “Día a día el estado del ojo empeoraba aún más”.
El ojo seguía hinchado “y empezó a sufrir picazón en la piel, dolor en los huesos, pérdida de cabello, falta de concentración y ansiedad”.
Ciaran Morgan fue otra vez con la oftalmóloga y se le realizó una resonancia magnética en octubre de 2021.
Lo que menos pasó por su cabeza traía el resultado del examen: “hallaron un tumor del tamaño de una pelota de tenis que empujaba el ojo hacia adelante”.
En medio del impacto la segunda noticia fue: Esto es de cirugía con urgencia hoy, Ciaran está recuperada.
Le diagnosticaron un meningioma intraóseo del ala esfenoidal. Su tumor era tan complejo que los médicos hicieron un modelo 3D de su cráneo para entender cómo extirpar el cáncer sin causar lesiones que limiten su vida.
Mirror
Devastada con noticia del tumor cerebral
Cuando su experiencia empieza a conocerse, la mujer recuerda: “Quedé devastada y llorando ante la noticia. Mi mente estaba corriendo sobre cómo se lo iba a decir a mis dos hijos. Los médicos me dijeron que mi tumor era complejo y, aunque estaba detrás de mi ojo, apenas tocaba mi nervio óptico, razón por la cual todavía tenía vista”, explicó, según Mirror.
El tumor fue creciendo y “pasó desde la parte superior de mi cabeza, debajo de mi ojo”, hasta crecer en el cráneo, señaló MegaNoticias.
Después de una operación de 10 horas, Ciaran ahora tiene una placa de titanio que reemplaza parte de su cráneo y una cuenca ocular de malla reconstruida.
Mirror
Aplausos y apoyo a la investigación
“Desde mi diagnóstico, encuentro mucha estimulación y estar en situaciones sociales me pone ansiosa, mientras que antes no lo hacía”, compartió al medio británico.
La mujer, que vive en Devon, Inglaterra, “a principios de agosto participó en una maratón para la organización benéfica Brain Tumor Research y se llevó los aplausos de todos”, publicó La Nación.
Mel Tiley, gerente de desarrollo comunitario de la organización benéfica Brain Tumor Research, opinó, añadió La Nación, que “la historia de Ciaran es un crudo recordatorio de la naturaleza indiscriminada del tumor cerebral, que puede afectar a cualquier persona”.
Animada, Ciaran, tras participar en la maratón, dijo a Mirror: “Este desafío fue una excelente manera de regresar a la normalidad, al mismo tiempo que genero conciencia y fondos para la investigación de una enfermedad que históricamente no recibió fondos suficientes”. (I)
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