Cada agresión y ataque que reciben los pobladores de Ucrania dejan una amarga huella. En el conflicto Rusia-Ucrania, la venganza quedó grabada en una acción que emprendieron los habitantes de Izyum de la provincia de Járkov, al este del país, luego de ser víctimas de un implacable bombardeo por parte de las fuerzas militares rusas.
Los pobladores que sobrevivieron a la invasión ordenada por Vladimir Putin hicieron lo suyo al cumplir una venganza en contra de los militares que llegaron a su localidad. Como si se tratara del mejor recibimiento, brindaron comida y alcohol a la tropa enemiga, desconociendo lo que venía detrás de tanta hospitalidad.
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El diario británico Mirror reseña que los alimentos y las bebidas estaban envenenadas, dando como resultado a 500 soldados intoxicados, de los cuales 28 están en condición delicada y 2 fallecidos.
“Hornearon pasteles para la 3° división rusa de fusileros motorizados y los untaron con veneno”, informó la Dirección de Inteligencia de Defensa de Ucrania al explicar que se encuentran hospitalizados bajo observación médica. (I)