Meteorólogos advirtieron que condiciones de La Niña podrían desarrollarse en el otoño y el inicio del invierno boreal, aunque se trataría de un episodio débil y de corta duración.
La Niña es la fase fría del patrón climático conocido como El Niño-Oscilación del Sur (ENSO), caracterizado por cambios en la atmósfera y la temperatura del mar en el Pacífico tropical. Este fenómeno suele desplazar la corriente en chorro hacia el norte, generando inviernos más húmedos y fríos en el norte de Estados Unidos, mientras que en el sur del país se observan inviernos más cálidos y secos. También se asocia a un aumento de la actividad ciclónica en el Atlántico.
El Servicio Meteorológico Nacional de EE. UU. informó que hay un 21% de probabilidad de que el periodo julio-septiembre cumpla con los criterios de La Niña. La posibilidad aumenta a más del 50% en los trimestres móviles entre septiembre y enero.
Publicidad
“Si La Niña se forma, es probable que sea débil, lo que significa que no tendría una fuerte influencia sobre el invierno”, explicó Emily Becker, investigadora de la Universidad de Miami y autora principal del blog ENSO de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), en declaraciones a Live Science.
El año pasado se esperaba que La Niña apareciera en el verano boreal, pero no se consolidó hasta diciembre. Ese retraso impidió que el fenómeno alcanzara fuerza antes del invierno. Becker señaló que es posible que las temperaturas oceánicas superiores al promedio hayan influido en el retraso, en un contexto global marcado por el calentamiento climático.
El episodio del invierno pasado no fue registrado oficialmente como La Niña, ya que las temperaturas no se mantuvieron bajo el umbral requerido durante al menos cinco trimestres consecutivos de tres meses.
Publicidad
“Es muy posible que terminemos con otro invierno como el de 2024-25, con algunos meses de condiciones de La Niña, pero sin alcanzar los criterios para ser considerado un evento en nuestros registros históricos”, añadió Becker. “Sin embargo, los impactos fueron similares a los que esperaríamos en una La Niña moderada”. (I)