La expresidenta de Argentina (2007-2015) y actual vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, no puede evitar que sus problemas legales acaben.

El pasado miércoles, la Cámara Federal de Casación Penal argentina rechazó un recurso de queja formulado por Fernández en relación con la denominada “causa de los cuadernos”, confirmando de este modo su procesamiento en esta causa, según informaron a Efe fuentes judiciales.

Publicidad

En septiembre de 2018, el fallecido juez Claudio Bonadio procesó a Fernández y pidió su prisión preventiva —que no se hizo efectiva por tener entonces fueros como senadora y que fue revocada en 2020— por la denominada “causa de los cuadernos de la corrupción”, al considerar que la expresidenta fue la jefa de una asociación ilícita que operó entre 2003 y 2015, así como beneficiaria de 27 hechos de soborno.

El máximo tribunal penal rechazó la queja interpuesta por la defensa al considerar que la resolución de su procesamiento “no se trata de una sentencia definitiva ni de un auto que ponga fin a la acción, a la pena o haga imposible que continúen las actuaciones”.

Publicidad

También se señaló que no se observan signos de “arbitrariedad” o “cuestión federal” que justifiquen la apertura de un recurso de casación, tal y como solicitó la defensa de Fernández.

La decisión mantiene el embargo de 1.500 millones de pesos (unos 14 millones de dólares) impuesto a la expresidenta, puesto que este tipo de medidas cautelares “no constituyen sentencia definitiva” y por ello son “insusceptibles de recurrirse” ante la Cámara de Casación.

En su voto particular, la jueza Figueroa advirtió que, si bien la resolución del procesamiento no es definitiva, “en casos excepcionales resulta equiparable a tal, en tanto ocasiona un grave daño de imposible o tardía reparación ulterior que requiere tutela judicial inmediata”.

El abogado de la vicepresidenta indicó que llevarán el caso ante la Corte Suprema de Justicia “a través de un recurso extraordinario”, por lo que este procesamiento “no está aún firme”.

Historia de varios años

“Cuadernos de la corrupción” es un proceso que comenzó a mediados de 2018 como una investigación por supuestos sobornos millonarios que habrían pagado importantes empresarios a cambio de obtener contratos de construcción de obra pública entre 2003 y 2015, durante los gobiernos de Fernández y el previo de su esposo, Néstor Kirchner, fallecido en 2010.

Medio centenar de personas, entre exfuncionarios del Gobierno y empresarios, ha sido imputado y varios se han acogido a la figura del arrepentido, que les permite permanecer en libertad a cambio de colaborar con la Justicia.

En la causa, Kirchner fue considerada como “jefa de una asociación ilícita”, por lo que el juez Bonadio llegó a pedir su desafuero, lo que al final no ocurrió.

Supuestamente esos sobornos se usaban para financiamiento ilegal de las campañas electorales del kirchnerismo, para gestión política, para comprar voluntades en el Poder Judicial y, sobre todo, para “engrosar su patrimonio personal”, dijo Bonadio.

La causa se conoce como “cuadernos de la corrupción” porque la trama fue destapada por una serie de detalladas anotaciones sobre supuestos pagos de coimas, que tomaba en cuadernos escolares un chofer del extinto Ministerio de Planificación Federal de Argentina, el más relevante del kirchnerismo, y que salieron a la luz en una investigación del diario La Nación y cuyas copias terminaron en manos de la Justicia.

Esas libretas contenían con detalle los movimientos que supuestamente ese conductor realizó durante diez años para recolectar grandes sumas de dinero de poderosos empresarios para ser después entregadas a altos funcionarios.

Diego Cabot, periodista de La Nación que destapó el caso junto con el conductor, dijo en una columna: “Los vericuetos procesales se empiezan a agotar. Ya son siete los jueces que han revisado y se han adentrado en la causa —el juez de instrucción, tres de Cámara y otro tanto de Casación— y también son tres las instancias que se han pronunciado y en diferentes momentos, procesaron o confirmaron las imputaciones contra Cristina Kirchner como jefa de una asociación ilícita”.

Este caso, de gran impacto mediático, mantiene en la cárcel a varios ex altos cargos kirchneristas y empresarios, mientras que muchos otros involucrados han reconocido la existencia de una red de corrupción. (I)