El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, advirtió este lunes de que España no va a permitir que se den pasos atrás en el espacio europeo sin fronteras Schengen, en la víspera de que la Comisión Europea presente una esperada revisión.

"Schegen se creó para la libertad de movimientos dentro del espacio europeo, para la libertad de movimientos de los ciudadanos europeos, y ese logro es un logro de la construcción europea. España no va a permitir que se vaya atrás en él", afirmó Albares en una comparecencia ante la prensa española al término de un Consejo europeo de Exteriores celebrado hoy en Bruselas.

Publicidad

El Ejecutivo comunitario tiene previsto presentar este martes su esperada revisión del Código de fronteras Schengen, que despierta inquietud en España por el temor a que los chequeos policiales se conviertan en controles fronterizos encubiertos.

La posición de España, remarcó, es "muy clara: la integridad y el respeto de espacio Schengen es un logro absoluto de la construcción europea".

Publicidad

El espacio Schengen, insistió el jefe de la diplomacia española, es "uno de los grandes logros de la construcción UE; está junto a la libertad de movimiento y a la moneda única probablemente entre los principales logros, y yo diría y para España desde luego lo es, uno de los logros irrenunciables".

Albares subrayó que "todo aquello que dañe la integridad del espacio Schengen no contará con el apoyo de España porque supondrá un paso atrás en la construcción europea".

"Los que somos europeístas, lo que creemos en Europa, consideramos que Europa tiene que avanzar, no retroceder", remarcó el ministro.

Albares rechazó que se pueda mezclar la libertad de movimientos en la UE con el debate sobre crisis migratorias, ya que "no tienen absolutamente nada que ver".

"Los movimientos migratorios irregulares, que tienen mucha utilización, y en estos momentos estamos viendo una utilización política de ellos, que es la forma más aberrante de utilizar a seres humanos, tiene muchos tratamientos", reflexionó Albares en alusión a Bielorrusia y al uso que el régimen de ese país ha hecho de personas en lo que se ha considerado un "ataque híbrido" a la UE.

Como ejemplo de forma de proceder frente a los fenómenos migratorios, Albares puso la política de las autoridades españolas durante años.

"España hace mucho que conoce los movimientos migratorios irregulares y ha demostrado que hay formas muy eficaces de cooperar con los países de tránsito y origen y de prevenir".

Se trata, dijo el ministro, de un asunto de “fondo” y hay que gestionarlo con esquemas “a largo plazo”. (I)