Podrán tener decenas de años de historia, pero la marina real británica intenta estar a la vanguardia de la tecnología actual.
Gravity Industries ha publicado un video del ejercicio de los súbditos de su majestad la Reina Isabel II. Muestra tres embarcaciones de alta velocidad (RIB) con comandos de los Royal Marines acercándose al buque de la marina británica HMS Tamar.
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Uno de los soldados despega de la lancha neumática y aterriza en la cubierta de Tamar. Luego, el soldado lanza una escalera de cuerda por el costado del barco antes de sacar un arma para asegurar al resto de los soldados que suben a bordo.
Durante otro ejercicio, tres soldados equipados con un “jetpack” aterrizan simultáneamente en el buque de guerra.
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Los ejercicios son una colaboración entre Royal Marines y la empresa Gravity Industries. El propósito es mostrar cómo se puede utilizar esta tecnología al abordar barcos, una tarea que a menudo está reservada a las fuerzas especiales.
Los soldados están equipados con un jetpack desarrollado por Richard Browning, quien fundó la empresa Gravity Industries en 2017. Browning ha servido anteriormente seis años en las fuerzas de reserva de los Royal Marines. El jet pack utilizado consta de cinco motores a reacción. Les permiten volar hasta ocho minutos a velocidades de hasta 88 kilómetros por hora, informó la compañía.
Dos motores a reacción están unidos a cada mano, así como uno más grande en la parte posterior. Según Gravity Industries, el equipo pesa aproximadamente 27 kilogramos y puede elevar a una persona que pesa 85 kilogramos a una altitud de 3600 metros.
Gran interés a nivel internacional
Varios países han expresado interés en utilizar mochilas propulsoras en operaciones militares. Richard Browning de Gravity Industries compartió que se ha entrenado previamente a bordo con las fuerzas especiales holandesas en un ejercicio que incluyó varios helicópteros.
En particular, los Navy Seals de EE. UU. están investigando la utilidad de las mochilas propulsoras al abordar barcos. Esto a menudo lo hace una lancha neumática con fuerzas especiales que se colocan en el costado del barco y luego se colocan en una escalera de cuerda que se usa para subir a bordo. Una alternativa es transportar a los soldados en helicóptero, donde descienden a cubierta.
Ambas se consideran operaciones de riesgo, incluso durante el entrenamiento en tiempos de paz. En una situación aguda, los soldados serán vulnerables, especialmente al trepar por el costado del barco.
Una gran oportunidad
Con el uso de mochilas propulsoras, los soldados pueden subir rápidamente a bordo y asegurar el área para los refuerzos.
El valor militar de tener soldados volando solos, con un dispositivo adherido a la espalda, se ha explorado durante décadas. Pero solo recientemente la tecnología ha madurado lo suficiente como para ser utilizada en ejercicios realistas.
Al parece pronto lo veremos en las espaldas de muchos marineros en tareas de abordaje. (I)