El conductor de un taxi que circulaba por la avenida Argelia, en el sur de Quito, recibió una llamada de su hermano, quien le solicitaba ayuda en una emergencia. Él se acercó hasta Pueblo Unido, donde quedaron en encontrarse con su familiar, pero al llegar se dio cuenta de que en el carro de su pariente estaban dos sujetos desconocidos.